10 alimentos esenciales para mantener sano y fuerte el corazón
El corazón es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo y mantenerlo sano es esencial. Descubre 10 alimentos que, gracias a sus propiedades nutricionales, protegen el corazón actuando sobre la presión arterial, los niveles de colesterol y otros factores.

La nutrición juega un papel fundamental en el mantenimiento de la salud general de nuestro organismo. Los nutrientes que ingerimos a través de los alimentos aportan energía y sustancias esenciales para el buen funcionamiento de los órganos y tejidos.
Una dieta equilibrada no sólo ayuda a prevenir deficiencias nutricionales, sino que también ayuda a reducir el riesgo de numerosas enfermedades, entre ellas la obesidad, la diabetes, la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares.
La importancia del corazón en el funcionamiento del cuerpo
El corazón es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo, un motor incansable que trabaja sin descanso para asegurar la circulación sanguínea y la oxigenación de todos los tejidos. En promedio, un corazón sano late unas 100.000 veces al día, bombeando más de 7.500 litros de sangre a través de un complejo sistema de arterias y venas.

Su correcto funcionamiento está influenciado por múltiples factores, entre ellos la genética, el estilo de vida y la nutrición.
Alimentos para mantener un corazón sano y fuerte
Una dieta sana y equilibrada puede marcar la diferencia en la prevención de enfermedades cardiovasculares. Existen numerosos alimentos que, gracias a sus propiedades nutricionales, ayudan a mantener el corazón sano reduciendo la inflamación, regulando los niveles de colesterol y mejorando la circulación sanguínea.
1. Pescado azul (salmón, caballa, sardinas, atún)
Rico en ácidos grasos omega-3, reduce la inflamación, baja los niveles de triglicéridos, aumenta el colesterol “bueno” (HDL) y mejora la salud arterial. También ayuda a prevenir arritmias y trombosis. Cantidad recomendada: 2-3 raciones por semana (aproximadamente 100-150 g por ración).
2. Frutos secos (nueces, almendras, avellanas, pistachos)
Fuente de grasas saludables, omega-3 y antioxidantes que reducen el colesterol “malo” (LDL), mejoran la circulación y reducen la inflamación.

Cantidad recomendada: una ración de aproximadamente 30 g al día (equivalente a un puñado).
3. Aceite de oliva extra virgen
Rico en polifenoles y grasas monoinsaturadas, reduce el colesterol LDL y mejora la elasticidad de los vasos sanguíneos, reduciendo el riesgo de hipertensión.
Cantidad recomendada: 2-4 cucharadas al día, preferiblemente crudo.
4. Legumbres (garbanzos, lentejas, frijoles, guisantes)
Ricos en fibra soluble, reducen los niveles de colesterol en sangre, estabilizan los niveles de azúcar en sangre y promueven la salud intestinal, lo que a su vez tiene un efecto positivo en el sistema cardiovascular.

Cantidad recomendada: 3-4 raciones por semana (aproximadamente 150 g cocidos por ración).
5. Granos integrales (avena, quinua, arroz integral, espelta, cebada)
Fuente de fibra, ayuda a mantener bajo control los niveles de colesterol y azúcar en sangre, previniendo la hipertensión y las enfermedades cardíacas.
Cantidad recomendada: 2 raciones al día (1 ración = 1 rebanada de pan integral, 30 g de cereales o 80 g de pasta/arroz integral).

6. Bayas (arándanos, fresas, frambuesas, moras)
Contienen antioxidantes (flavonoides y antocianinas) que reducen la inflamación, mejoran la presión arterial y previenen la oxidación del colesterol LDL, proceso que aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Cantidad recomendada: 3-4 raciones por semana (una ración = 150 g).
7. Verduras de hoja verde (espinacas, col rizada, acelga, lechuga, rúcula)
Ricos en vitaminas y antioxidantes, mejoran la función arterial, reducen la presión arterial y protegen contra el daño cardiovascular.

Cantidad recomendada: al menos 1-2 raciones al día (una ración = 80-100 g de verduras crudas o cocidas).
8. Chocolate amargo (mínimo 70 % de cacao)
Los flavonoides que contiene mejoran la circulación, reducen la presión arterial y protegen los vasos sanguíneos.

Cantidad recomendada: 20-30 g al día, preferiblemente sin azúcares añadidos.
9. Tomates
Contienen licopeno, un potente antioxidante que ayuda a reducir el colesterol LDL y mejorar la salud arterial. También son ricos en potasio, que regula la presión arterial.

Cantidad recomendada: al menos 3-4 raciones por semana (una ración = 150 g, fresca o cocida).
10. Té verde
Rico en catequinas y polifenoles, reduce la inflamación, mejora la función endotelial (salud arterial) y baja la presión arterial.

Cantidad recomendada: 1-2 tazas al día, preferiblemente sin azúcar.
La información contenida en este artículo es sólo para fines informativos y no pretende sustituir el consejo de un médico o nutricionista. Para un asesoramiento personalizado sobre salud cardíaca y nutrición, siempre es recomendable consultar con un profesional calificado.