Alerta por ola de calor: tres trucos que te ayudarán
Varias provincias argentinas se encuentran afrontando elevados valores de temperatura, incluso rige alerta por ola de calor en muchas ciudades. Te proponemos trucos para sobrellevarlo de la mejor manera posible.
La primera ola de calor del verano 2021 en la Ciudad de Buenos Aire dice presente, pero las altas temperaturas no son exclusivas de los porteños, por supuesto. Desde hace algunos días y hasta pasado incluso el fin de semana, buena parte del norte patagónico y porción central del país vivirá marcas térmicas que agobian de solo imaginarnos el número, y más aún si le agregamos el incremento de humedad en el aire, dejando sensaciones térmicas muy elevadas.
Las personas que están atravesando un golpe de calor, suelen tener algunos de estos síntomas: agitación, pulso acelerado, dolor de cabeza, decaimiento, piel enrojecida muy seca o con sudoración excesiva, náuseas, vómitos, fiebre, cambios en el estado mental o del comportamiento, confusión y hasta dificultad en el habla.
Te mostramos tres trucos y consejos que podrás poner en práctica cuanto antes, para ayudarte a sobrellevar de la mejor manera estos días complicados de calor. Lo más importante es que tu salud note lo menos posible los efectos nocivos que ejercen las elevadas temperaturas sobre el organismo, especialmente en las personas más vulnerables como: niños, mayores de 65 años y personas enfermas.
1. Cerrar a tiempo las ventanas
Para mantener los ambientes de tu casa frescos, lo ideal es utilizar la ventilación natural de manera adecuada. Se recomienda mantener las ventanas cerradas durante los momentos de máxima insolación, para evitar que el aire sumamente caliente que circula en el exterior (sobre todo entre las 10 am y las 5 pm), ingrese a tu hogar.
Por otro lado, el periodo recomendado para ventilar es sin dudas la noche cuando las temperaturas descienden, aunque no lo hagan demasiado, siempre será menos sofocante el aire a la sombra que el de pleno mediodía. Por lo tanto, abrir las ventanas a la madrugada y volver a cerrarlas antes de la media mañana es en líneas generales lo más aconsejable.
Por supuesto, la recomendación extra es tener instalada en las ventanas que dejes abiertas la típica red/malla metálica (el llamado mosquitero), para evitar que los insectos ingresen a tu hogar, y perturben no sólo tu sueño sino también tu bien estar general. Recuerda que el mosquito Aedes aegypti, es el principal vector de los virus que causan la enfermedad del dengue, zika y la fiebre chikunguña.
Después de una sequía tan prolongada como la que aún estamos atravesando, cuando se dan algunas lluvias copiosas, eso alienta a que los huevos eclosionen y haya una “invasión” de mosquitos, o sea mayor circulación del insecto, por eso se recomienda descacharrar y protegerse para prevenir enfermedades.
2. Beber agua sin sed
Partamos de que la sensación de sed es un síntoma de deshidratación. Por lo tanto, deberíamos beber agua de forma regular antes de sentirnos sedientos (aunque sea a pequeños sorbos), para alcanzar los dos a tres litros diarios que los médicos nos recomiendan, en función de nuestras características personales de: peso, edad, estado de salud, tipo de actividad que estemos realizando y temperatura ambiente.
La hidratación cuando estamos bajo el efecto de elevadas temperaturas es primordial. Por el exceso de calor el cuerpo pierde líquido con rapidez a través del sudor (agua, sodio, potasio, etc.), nuestro organismo utiliza como mecanismo de defensa la sudoración, para que se active el proceso de evaporación de ese sudor y así refrescarnos. El sudor depositado sobre la piel se evapora, para lograr ese cambio de estado (de líquido a gaseoso) toma calor (energía) de nuestro cuerpo, así el organismo logra bajar su temperatura de manera automática y natural.
3. Hielo y ventilador como aliados para el sueño
Según distintos estudios, la temperatura óptima para dormir está entre los 16 y los 21 °C, el cerebro necesita estar un poco más fresco que el resto del cuerpo. En noches cálidas como las que estamos viviendo, donde los valores no logran bajar de los 23°C, descansar correctamente se vuelve cuesta arriba. Es justamente durante la noche, que nuestro cerebro procesa la información recibida durante el día, y utiliza ese descanso para reequilibrar y reparar el cuerpo física y mentalmente.
Una solución práctica para lograr enfriar la temperatura del aire de tu habitación, consisten en colocar unos cubos de hielo (o botellas con agua congelada), frente al ventilador. De hecho, existen electrodomésticos conocidos como “enfriadores evaporativos de aire”, que utilizan este sistema, están compuestos de un ventilador, un depósito de agua (o hielo), y paneles de CELdek.
Su funcionamiento es simple; se trata de una evaporación adiabática, (el equipo no intercambia calor con su entorno para enfriar el ambiente), cuando el aire pasa a través de los paneles empapados en agua, se evapora y enfría el ambiente. Es importante, si usas este sistema, que abras una ventana y dejes circular el aire, eso ayudará a que haya un recambio de aire adecuado para que se mantenga fresco, y evite el aumento de humedad en el ambiente, resultando contraproducente para aliviar la sensación de calor.