Cambio climático: la peor amenaza de los glaciares
En lo que va del siglo XXI la gran mayoría de los glaciares del mundo han perdido masa a una velocidad jamás vista. Sólo unos pocos no han presentado este comportamiento, entre los que se destaca el Glaciar Perito Moreno.
Más allá de la majestuosa belleza de estos ríos de hielo, los glaciares tienen un papel fundamental en la naturaleza siendo gigantescos reservorios de agua para los períodos secos, atrapando el agua que cae como nieve a gran altura durante las estaciones húmedas y liberándola como agua de deshielo en las estaciones secas.
Los glaciares aseguran que los ríos y sus cuencas tengan suministro constante de agua durante todo el año, sustentando la vida de la flora y la fauna de la región. También los seres humanos dependen del agua proporcionada por los glaciares, no sólo por el reservorio de agua dulce, sino también en cuestiones de energía hidroeléctrica, el riego, la ganadería, producción, transporte entre otras.
En el siglo XXI se ha dado la tasa de pérdida de masa jamás vista
Los glaciares están en constante movimiento, descendiendo por sus valles unos centímetros o incluso varios metros, pero su tamaño general depende de la cantidad de nieve que se pierde por derretimiento y de la nieve fresca que cae encima, por lo que cuando las nevadas equivalen a la cantidad de agua de deshielo perdida durante un año, se dice que el glaciar está en equilibrio, es decir que se repone desde la parte superior lo que pierde de agua en la parte inferior, y por lo tanto, no cambia de tamaño. Pero cualquier disminución en la cantidad de nieve caída o un aumento de temperatura puede resultar rápidamente en un aumento en el deshielo, haciendo que un glaciar retroceda por su valle.
Detectan lluvia por primera vez a 3.200 metros en... ¡Groenlandia!
Entre 2000 y 2019, los glaciares perdieron a nivel mundial 267 gigatoneladas de agua por año, y esa cifra se está acelerando. Los glaciares cubren el 0,5% de la superficie de la Tierra, puede que este valor parezca muy pequeño, pero si tomamos en cuenta su importancia para las diferentes actividades, ese porcentaje crece de manera exponencial. Solo por mencionar un ejemplo, el Indo en Pakistán y el noroeste de la India alimenta el sistema de riego más grande del mundo, miles de millones de personas dependen de esa cuenca para alimentarse.
Solo unos pocos no retroceden
En el mundo hay aproximadamente 200.000 glaciares y una importante proporción se encuentran en la cordillera de los Andes. El número total de glaciares Andinos es de 18.799 y la superficie de hielo que representan es de 29.360 km2 según detalla el Inventario Global de Glaciares Randolph (GLIMS), el único que aborda todas las regiones del mundo, aunque ese número puede discrepar de otros inventarios, por ejemplo, el inventario de Argentina (Inventario Nacional de Glaciares) habla de casi 17.000 sólo en el país, por lo que la cifra anterior sería ampliamente superior.
Hay un pequeño número de glaciares en el mundo que no se está derritiendo y se mantiene estable, como comúnmente se los califica. Eso quiere decir que lo que pierden de masa en el verano, lo recuperan en el invierno. Incluso hay algunos que ganan superficie, aunque los glaciólogos se encargan en subrayar que estos son la excepción a la regla.
Entre las zonas del mundo que presentan este comportamiento más estable e incluso con glaciares que ganan masa, se destaca la zona cordillerana entre Argentina y Chile, donde se observan los glaciares estables como Horcones Inferior en Mendoza, Glaciar Verde cerca de la ciudad de Bariloche, el glaciar Spegazzini límite entre Argentina y Chile, en la provincia de Santa Cruz y el Perito Moreno en Santa Cruz. Mientras que el glaciar Pio XI en la región de Magallanes en Chile (el más grande de América Latina), el glaciar Finlandia y el Garibaldi ambos ubicados sobre el sur de Chile son unos de los pocos en el mundo que han presentado una expansión en los últimos años.