Comenzaron los días más cortos en Argentina: cómo combatir la depresión estacional por falta de luz solar
Varios puntos del país ya comenzaron con los atardeceres más tempraneros del año, y la cantidad de horas de luz neta empieza a alcanzar los valores mínimos. ¿Cómo puede incidir esto en la salud? ¿Cómo detectar y paliar el trastorno afectivo estacional?
Los horarios de salida y puesta del Sol determinan la cantidad de horas de luz que tiene el día. Con la llegada del mes de junio, los días se acercan a su mínimo anual en cantidad de horas luz en el hemisferio sur, el cual se dará cercano al solsticio de invierno, es decir, cerca del 21 de junio.
Pero lo interesante es que el día del año en que amanece más tarde no coincide con el día del año en que atardece más temprano, sino que suele haber un desfasaje. En Argentina suele ocurrir que en las distintas regiones del país primero se produce el atardecer más tempranero del año días antes del solsticio, y luego el amanecer más tardío pasado el solsticio.
Veamos algunas ciudades de referencia en los cuatro puntos cardinales extremos del país, de acuerdo a la información suministrada por el Servicio de Hidrografía Naval:
- Buenos Aires ya entró entre este 4 de junio y hasta el 19 de junio en los atardeceres más tempraneros del año, a las 17:49 hora local. Pero los amaneceres más tardíos se darán entre el 27 de junio y el 2 de julio, a las 8:01 horas. Esto promedia un valor neto cercano 9h 50´ de luz solar cerca del 21 de junio.
- Al oeste del país, la ciudad de Mendoza tambien ya comenzó con los atardeceres más tempranos, a las 18:35 h. Pero los amaneceres más tardíos recién llegarán entre el 23 de junio y el 7 de julio, a las 8:38 h. Esto promedia un valor neto de casi 10 horas y media de luz solar cerca del solsticio.
- En el extremo norte de Argentina tomamos como representativa a la ciudad de La Quiaca, que tambien ha comenzado hasta el 9 de junio con los atardeceres más tempraneros, a las 18:45 h, mientras que los amaneceres más tardíos recién llegarán a partir del 30 de junio, siendo a las 8:02 h. En total, se promedia un valor neto de casi 10 h 50´de luz solar cerca del 21 de junio.
- En el extremo sur del territorio nacional, la ciudad del fin del mundo, Ushuaia, tendrá sus amaneceres más tardíos entre el 22 y el 27 de junio (9:59 h) y sus atardeceres más tempraneros entre el 15 y 18 de junio (17:10 h). Su valor neto de horas de luz solar es de los más bajos del país cerca del solsticio, promediando poco más de 7 horas.
El impacto de la falta de luz solar: el trastorno afectivo estacional
La falta de luz (y el calor) en invierno puede afectar nuestro estado de ánimo de varias maneras.
La luz solar es esencial para la producción de serotonina, una hormona que nos hace sentir felices y positivos. Cuando los días son más cortos y hay menos luz solar, nuestros niveles de serotonina disminuyen, lo que puede provocar una sensación de tristeza, apatía, fatiga y falta de interés en las actividades cotidianas. El calor también tiene un efecto positivo en nuestro estado de ánimo. Las temperaturas cálidas nos hacen sentir más activos y animados. En cambio, el frío puede provocar una sensación de letargo y desmotivación.
Otros factores además pueden contribuir al impacto del invierno en nuestro estado de ánimo, como los cambios en nuestro horario de sueño, la menor actividad física y la mayor tendencia a pasar más tiempo en lugares interiores.
En algunos casos, la falta de luz y calor en invierno puede desencadenar un trastorno afectivo estacional (TAE), un trastorno caracterizado por cambios estacionales en el estado de ánimo y los niveles de energía, que puede afectar profundamente la calidad de vida de las personas que lo experimentan.
¿Cómo Identificar el TAE?
- Cambios en el estado de ánimo: la tristeza persistente y la sensación de desesperanza son síntomas comunes del TAE. La disminución notable en el estado de ánimo en coincidencia con la llegada del invierno, podría ser un signo de este trastorno.
- Aumento del apetito y antojo de carbohidratos: muchas personas con TAE experimentan un aumento en el apetito, especialmente por alimentos reconfortantes ricos en carbohidratos simples como pasta, pan y dulces.
- Fatiga y somnolencia: sentirse constantemente cansado o tener dificultades para levantarse por la mañana son señales de alerta. El TAE puede hacer que sea difícil concentrarse o realizar tareas cotidianas.
- Retraimiento social: las personas con TAE pueden sentirse menos interesadas en actividades sociales y experimentar una disminución en el disfrute de actividades que antes les resultaban placenteras.
Consejos para paliar los efectos por la falta de luz solar
- Exposición a la luz solar: pasar tiempo al aire libre durante el día, incluso en días nublados, puede ayudar a mejorar el estado de ánimo al aumentar la exposición a la luz natural.
- Ejercicio regular: el ejercicio físico regular puede ayudar a reducir los síntomas del TAE al aumentar la producción de endorfinas, neurotransmisores que mejoran el estado de ánimo.
- Dieta saludable: consumir una dieta balanceada rica en frutas, verduras y granos enteros, y limitar los alimentos ricos en azúcares y carbohidratos simples, puede ayudar a mantener un estado de ánimo estable y mejorar la energía
- Terapia de luz: la terapia de luz, que implica exponerse a una luz brillante especialmente diseñada durante ciertas horas del día, puede ser efectiva para algunos individuos con TAE al regular los ritmos circadianos y aumentar los niveles de serotonina.
- Apoyo emocional: buscar el apoyo de amigos, familiares o grupos de apoyo puede proporcionar un sistema de apoyo invaluable durante los momentos difíciles. No dudar en comunicarse con un profesional de la salud mental si necesita ayuda adicional.
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