Cómo y cuándo podar la menta, una de las aromáticas más populares en Argentina
La menta, conocida por su aroma refrescante y sus múltiples usos medicinales y culinarios, requiere cuidados específicos para mantener su salud y productividad. Si sos fanático de esta planta, el momento de cuidarla es ahora.
La menta es una de las plantas aromáticas más populares en los hogares argentinos. Su versatilidad en la cocina, su fragancia y sus propiedades medicinales la convierten en una planta favorita tanto para cultivadores experimentados como para aficionados.
Sin embargo, necesita ciertos cuidados para evitar que crezca de manera descontrolada. La poda es una de las tareas esenciales para mantenerla saludable y productiva.
¿Cómo cultivar menta de forma eficiente?
La menta es una planta perenne vigorosa que prospera en suelos livianos con buen drenaje. Prefiere un sitio húmedo pero bien drenado, imitando su hábitat natural a lo largo de las orillas de los arroyos.
Para cultivarla al aire libre, es recomendable plantar uno o dos esquejes con una separación de medio metro en un suelo húmedo. También se puede cultivar en macetas, donde lo ideal es utilizar las de 25 centímetros de diámetro con orificios de drenaje.
Cuidados generales: Riego y cosecha
El cuidado de la menta es relativamente sencillo: si se planta al aire libre, es recomendable utilizar un mantillo ligero para mantener la tierra húmeda y las hojas limpias. En cuanto a las plantas de interior, se debe regar regularmente para mantener la tierra uniformemente húmeda.
La cosecha frecuente es la clave para mantener las plantas de menta en su mejor estado, porque las hojas jóvenes suelen tener más sabor que las viejas. Justo antes de la floración, se recomienda cortar los tallos a unos tres centímetros del suelo para promover un nuevo crecimiento.
¿Cuándo y cómo podar la menta?
Una planta de menta puede cosecharse dos o tres veces durante una temporada, recolectando hojas frescas según sea necesario. Sin embargo, es necesario realizar tareas específicas de poda según el momento del año:
Poda de mantenimiento: este tipo de poda no solo mejora el aspecto de la planta, sino que también aumenta la luz y la ventilación, lo que ayuda a prevenir enfermedades y promueve un crecimiento vigoroso. Para realizar esta poda, utiliza tijeras de podar manuales afiladas y esterilizadas para hacer cortes precisos y evitar dañar la planta.
Poda para fomentar el crecimiento: algunos jardineros optan por eliminar los botones florales antes de que se abran, permitiendo que la planta concentre su energía en la producción de hojas en lugar de flores. Además, se recomienda realizar una poda más exhaustiva a finales del invierno o principios de la primavera, cuando aparecen nuevos brotes basales.
Poda para controlar el crecimiento invasivo: una buena práctica es cortar la planta a ras de tierra a finales de verano antes del invierno, lo que ayudará a mantener su crecimiento bajo control. Durante la primavera, se pueden realizar varios cortes, aproximadamente uno al mes, para fomentar la aparición de nuevas hojas sin permitir que la planta crezca de manera desmedida.
Mucho más que una planta aromática
La menta es reconocida no solo por su sabor y aroma, sino también por sus múltiples beneficios para la salud. Esta planta contiene compuestos fenólicos y aceites esenciales, como el mentol, que le otorgan propiedades analgésicas, antiinflamatorias, antiespasmódicas, calmantes, relajantes y antibacterianas.
Entre los principales beneficios de la menta destacan su capacidad para aliviar síntomas digestivos, como cólicos y malas digestiones, reducir dolores musculares y de cabeza, y equilibrar las hormonas en mujeres con síndrome de ovario poliquístico. Además, la menta tiene una acción antibacteriana que ayuda a combatir infecciones y puede mejorar la memoria y el estado de ánimo gracias a su alto contenido en compuestos fenólicos.
Otro de sus usos populares es para aliviar la tos y los resfriados. El té de menta es un remedio casero eficaz para desinflamar la garganta y despejar las vías respiratorias, gracias a las propiedades del mentol y sus efectos antiinflamatorios y analgésicos.
El arte de podar y mantener la menta
La menta es una planta que, con los cuidados adecuados, puede proporcionar una cosecha abundante y constante. La poda regular no solo mantiene la planta en su mejor estado, sino que también asegura que su crecimiento no se descontrole.
Desde la eliminación de hojas muertas hasta la poda para evitar la floración, estos sencillos pasos te ayudarán a mantener tu planta de menta saludable y productiva. Con su versatilidad en la cocina y sus múltiples beneficios para la salud, la menta es una excelente adición a cualquier jardín o balcón en Argentina.