¿Cuál es la cueva más grande de Argentina?

Las cuevas, cavernas y grutas son un atractivo turístico cada vez más popular en Argentina y para conocer la más grande de nuestro país hay que ingresar 200 metros dentro de una montaña.

las brujas,malargue
La cueva más grande de Argentina está en Mendoza.

A sólo 65 km al sur de Malargüe, en Mendoza, se encuentra la cueva más grande de nuestro país y uno de los atractivos turísticos más importantes de la región: la caverna de Las Brujas. En sus salas subterráneas, las estalactitas y estalagmitas adquieren las más diversas formas, dimensiones y colores, haciendo de este lugar una alternativa al turismo aventura.

El área comprende aproximadamente 450 hectáreas, y fue declarada una reserva natural en 1990.

Es la gruta más importante de la Argentina y es un área de gran belleza, donde el agua ha cavado profundas galerías subterráneas, tallando a su paso diversas formas muy singulares. La entrada de la cueva está localizada en el cerro Moncol, a una altitud de 1.800 metros sobre el nivel del mar, y cuenta con más de 3000 metros de galerías que se han desarrollado a través de varias galerías y niveles de rocas calcáreas (calizas) del período Jurásico.

youtube video id=xmM1d8KWJP0

Se encuentra a unos 500 km de la ciudad de Mendoza. Se accede a través de la RN 40, culminando con un camino de acceso al lugar de 8 km desde la ruta. La localidad más cercana es el poblado de Bardas Blancas.

¿Qué se puede hacer en la caverna de Las Brujas?

La caverna de Las Brujas es el hogar de formas singulares de estalactitas y estalagmitas, galerías y grandes salas abovedadas, como la Sala de la Virgen, recibe su nombre debido a la semejanza de una estalagmita con la imagen de la virgen, y la Sala de las Flores, llamada así por la abundancia de unos corales que parecen flores.

El sistema de cuevas posee zonas muy húmedas, con un goteo constante. Y si se apagan todas las linternas, la oscuridad es total.

Luego, en el recorrido se atraviesa una zona denominada La Gatera, con una longitud de unos 20 metros, y su nombre hace referencia a que para avanzar hay que gatear, dado que su altura no supera el metro.

El sector de la caverna que se recorre es de aproximadamente unos 400 metros, con una duración estimada de 2 horas. En los alrededores de la entrada se encuentran estratos expuestos con evidencia fósil de moluscos gasterópodos, especies dominantes en el jurásico y en cretácico.

Al ingresar se provee de cascos y linternas y el guía acompaña al grupo en todo el trayecto. Se aconseja ingresar con zapatillas para trekking, de suela de goma labrada. La entrada tiene costo y está prohibido para menores de 7 años.

¿Cómo y cuándo se formó la caverna de Las Brujas?

La caverna se formó por la acción del agua. Cada centímetro de estas estalactitas y estalagmitas tarda 1300 años en formarse, de lo que se puede deducir que tiene millones de años de antigüedad.

El agua que cae del cielo se filtra por el suelo y, al entrar en contacto con la roca caliza, se disuelve. Esto se debe a que el agua contiene dióxido de carbono, que le da un pH ácido.

Cuenta la leyenda que una tribu asentada en esa región tenía a dos mujeres blancas como prisioneras. En una noche, lograron escapar, aunque fueron rápidamente perseguidas por sus captores. En su huida, se toparon con una extraña caverna y decidieron ocultarse en su interior. Los aborígenes que las perseguían pronto se dieron cuenta de que las mujeres habían ingresado en esa cueva, pero al adentrarse, ¡no lograron hallarlas! Unos minutos después, recordaron que al entrar en la cueva, dos aves blancas (lechuzas) salieron volando de su interior. Entonces, relacionaron que esas aves eran las mujeres, que habían transformado sus cuerpos para poder escapar. Desde aquel momento, el lugar se conoce como la "Caverna de las Brujas".

Durante el período Terciario, la cordillera de los Andes se levantó, lo que hizo que la roca caliza se quedara en posición casi vertical y sumamente fisurada. Esto facilitó la circulación del agua subterránea y, por lo tanto, la formación de la caverna.

cueva, argentina
Las paredes de esta cueva están repletas de texturas y colores.

A finales del último período glacial, la cantidad de nieve y hielo existente fue mucho mayor que la que precipita actualmente. Esto provocó una gran infiltración de agua, que favoreció la ampliación de los pasadizos de la caverna y la formación de los espeleotemas, estructuras rocosas que se generan por la acción del agua en las cuevas.

Los estudios arqueológicos realizados hasta el momento indican que la caverna fue utilizada por los aborígenes para diferentes rituales o como refugio temporal.



Referencia de la noticia

www.guiaturista.com.ar/cuyo/malarge/caverna-de-las-brujas.html