De locos: Singapur es el país más caro del mundo para tener un auto
Sin dudas Singapur es el país más caro para tener un auto. Un certificado para poder acceder a un auto tiene un costo no menor a 100.000 dólares. Y eso sin contar el valor del auto, el seguro y otros gastos. Es tan caro como para estar en el Libro Guinness de los Récords.
Para comenzar nuestra nota, pongamos en contexto la información. Singapur es una pequeña ciudad estado e insular en el sudeste asiático, al sur de Malasia. Tiene una superficie de unos 743 kilómetros cuadrados. O sea algo más de 3 veces la superficie de la ciudad de Buenos Aires. Allí viven unas casi 6 millones de personas. El ingreso de la población es alto, con un ingreso per cápita que supera los 70.000 dólares anuales.
Gran parte del ingreso de Singapur deviene de los servicios, tanto financieros, como a la industria. Ahora, de estos números surge que el espacio es algo vital en ese país. Y la calidad del aire un problema. Es por ello que el gobierno tiene una política muy restrictiva para tener automóviles. Tal como relata DW, Singapur es la ciudad más cara del mundo para tener un coche. Y ese costo va en ascenso.
Para poder tener un automóvil hay que acceder a un certificado de titularidad (COE). El costo de este certificado para un automóvil de categoría media ha aumentado recientemente hasta superar los 100.000 dólares. Aún con un ingreso alto, un local necesita de más de un año de trabajo para poder tener un coche. Eso hace que una ciudad tan densamente poblada no tenga tantos autos en circulación.
Un certificado por 10 años
El costo para acceder a un auto en Singapur es tan alto que fue incluído en el Libro Guinness de los Récords. Es el COE el que encarece todo el proceso. Se los adquiere a través de subastas públicas que se hacen dos veces al año, y tienen una validez de 10 años. Los valores no tienen relación con lo que cuesta el auto, sino que están en función del uso del espacio público. Según señala El Confidencial, en el país hay solo hay 851.339 vehículos registrados, según los datos de septiembre de 2023.
Tener un automóvil es casi un rasgo de status en Singapur, por todo el costo que ello supone. También es importante que este panorama se da en un país con un transporte público muy moderno y eficiente, por lo que para muchos locales tener un auto no es ni necesario ni una opción. El punto es que las licencias se subastan, y el gobierno entrega cada vez una cantidad menor. Entonces, por oferta y demanda, a menos licencias, cada vez más alto el costo.
Obvio que al valor del COE hay que sumar el costo del coche. Con lo que los números finales son realmente altos. Un automóvil de categoría media como un Toyota Altis tiene un COE que ahora asciende a más de 100.000 dólares. En el caso de los autos, la mayoría importados, el gravamen aduanero es del 41 %. Y todavía queda buscar un seguro. En concreto, tener un auto en Singapur representa un gasto cuatro veces más alto que en Estados Unidos o el Reino Unido.
El transporte público es moderno y muy eficiente
El sistema del COE se comenzó a utilizar en Singapur en 1990 con el objetivo de controlar la cantidad de automóviles que circulan por la ciudad, que se puede cruzar en media hora. Tomando datos aportados por el propio gobierno, la masa de autos ha disminuido en el último año, lo que seguramente no ocurre en muchos lugares del planeta. En la otra punta, el propio gobierno invierte mucho en el transporte público que además de muy eficiente, es barato y accesible para todos.
Estados Unidos es el país con más autos per cápita. Los datos oficiales indican que esa tasa es de 900 autos cada 1000 habitantes. Casi un automóvil por habitante. En Singapur, la tasa es de 150 autos cada 1000 habitantes. Para comparar, en Argentina esa tasa es de 238 autos cada 1000 habitantes. La Ciudad de Buenos Aires tiene la tasa más alta de un auto cada dos personas, y en el otro extremo está Santiago del Estero con un auto cada 11 habitantes.
En Singapur, los nuevos COEs se emiten solo cuando otros salen de servicio, lo que hace que ese valor vaya escalando también. Como sea, el país es como un gran experimento social para poder ser sustentable con el paso del tiempo. Pero no todo es color de rosa. El ministro de transporte del país, con una cuota de poder importante, ahora está siendo investigado por corrupción.
Un dato final: si compras un auto usado, lo compras con su COE emitido y con la validez que le quede por delante. Se pueden pedir extensiones a ese COE.