Descubren un nuevo volcán activo en el sur de Chile
Se trata del volcán Mate Grande, cercano al volcán Hudson en la región de Aysen. Es un volcán joven con no más de 5000 años y presenta riesgo geológico. La región está cubierta por nieve unos 10 meses al año.
Geólogos de la Universidad de Chile descubrieron un volcán activo al sur del país casi por casualidad en medio de una investigación en la región. La zona está cubierta por nieve gran parte del año por lo que el volcán aparecía oculto en muchas imágenes de la zona. Según los investigadores, se trata de un volcán activo con una caldera de unos kilómetros de diámetro.
Por su forma, al recién descubierto volcán se lo bautizó con el nombre de Mate Grande. De acuerdo con el informe relevado por la Universidad de Chile, se trata de un volcán joven de no más de 5.000 años de antigüedad formado en el Holoceno por la ausencia de erosión glaciar. Esta condición, junto a su cercanía al volcán Hudson, en el medio de la Falla Liquiñe-Ofqui, ha llevado a los científicos a pensar que se trata de un volcán activo.
El resultado de la investigación se dio a conocer en la revista Nature Scientific Reports y exploró en terreno y con imágenes aéreas toda el área comprendida por la falla, especialmente en la zona de Aysén. Con esa información, se determinó con la morfología y composición del terreno que había una caldera al suroeste de Coyhaique.
El Mate Grande y la falla Liquiñe-Ofqui
El autor principal de la publicación y académico del Departamento de Geología de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, el doctor en Geología Neotectónica, Gregory De Pascale, explicó que fueron necesarias varias visitas para lograr esta conclusión. Se realizó un estudio de campo, usando embarcaciones, y helicópteros, para el estudio de detección remota de las fallas activas en la Patagonia de la Falla Liquiñe‑Ofqui, en una zona que está cubierta con nieve diez meses al año, de difícil acceso por la altura y geografía que ostenta una tupida vegetación y bosque valdiviano. Durante un vuelo de helicóptero en verano, se podía ver claramente la diferencia de colores entre la roca basáltica, más oscura y que se produce en un evento eruptivo, en comparación con la más clara de las rocas intrusivas como el granito, que se forman dentro la Tierra.
La Falla Liquiñe-Ofqui es el nombre de un conjunto de fallas geológicas que corren cerca de 1.200 kilómetros en dirección norte-sur desde la Región del BioBío hasta el Golfo de Penas en Aysén. De Pascale señaló que “la Región de Aysén presenta una actividad volcánica importante porque es el punto de encuentro de las placas Antártica y de Nazca con la placa de Sudamérica. La Falla Liquiñe-Ofqui controla dónde se ubican los volcanes en la zona sur de Chile en la superficie. Mate Grande está en medio de la falla, marcando un cambio en la distribución de los volcanes dejando todos los ubicados al norte en el medio o al oeste de la falla con una huella geoquímica diferente al volcán Hudson que es el único que está al este de la falla”.
Mate Grande
El nombre es en honor a la cultura del mate que también se bebe en la Región de Aysén, y la caldera es como un mate enorme. De ahí su nombre. Es un volcán que tiene una caldera de cinco kilómetros de diámetro, a ochenta kilómetros al suroeste de Coyhaique y al noroeste de Volcán Hudson con menos de cinco mil años de antigüedad, por lo que se considera activo. Mediante los desplazamientos observados en terreno, se puede inferir que terremotos de alta intensidad generados en la Falla Liquiñe-Ofqui provocaron el colapso de parte del cráter del volcán Mate Grande.
El doctor De Pascale advirtió que al ser un volcán activo, Mate Grande presenta un peligro geológico. También indicó que “se espera una ruptura porque la Falla Liquiñe‑Ofqui se mueve rápido, entre 11,6 a 24,6 milímetros por año, lo que podría ocasionar sismos de alta magnitud, pero no es posible saber cuándo ocurrirán”.
Los investigadores visitaron la zona en varias oportunidades entre el año 2015 e inicios del 2020. Entre las conclusiones se indicó que la porción más al sur de la zona de Falla Liquiñe-Ofqui se encuentra dentro de la ventana que se formó debido a la subducción oblicua de la Cordillera en la Patagonia. Se concluyó que el volcán creció en una caldera también desplazada a lo largo de la falla y tiene una geoquímica distinta de estratovolcanes adyacentes.
Según indica El Ágora, Chile es el país que posee la segunda cadena volcánica más grande y de mayor actividad en el mundo después de Indonesia, en el llamado Cinturón de Fuego. Solo en Chile, hay más de 2.000 volcanes, de ellos unos 125 son considerados geológicamente activos y cerca de 60 han tenido algún tipo de actividad eruptiva histórica en los últimos 450 años. Por su ubicación, mucho de ellos están cercanos o sobre el límite con Argentina, y representan algún tipo de peligro al este de la cordillera.