Día Mundial de los Asteroides: un repaso por los gigantes meteoritos que han logrado impactar en territorio argentino

Desde tiempos inmemoriales la humanidad ha elevado los ojos al cielo con asombro, curiosidad y hasta con temor, observando cómo objetos luminosos e incandescentes surcan el firmamento. Asteroides, cometas, meteoroides, meteoros y meteoritos, fueron y son fuertemente estudiados.

Con el avance de los siglos y milenios, las herramientas tecnológicas cada vez más sofisticadas junto con el arduo trabajo de los astrónomos y también aficionados, han logrado identificar, monitorear y explicar avistamientos de cometas, lluvias de “estrellas”, bólidos de distintos colores, y por supuesto precisar los impactos de meteoritos. Lógicamente este último es uno de los eventos más relevantes para la vida en la Tierra.

Dentro de todo el abanico de cuerpos celestes mencionados, el desafío más importante para los científicos, sin dudas, es lograr precisar el lugar, y calcular con el mayor tiempo de anticipación un posible acercamiento/impacto de cualquier cuerpo extraterrestre sobre el planeta Tierra, como los asteroides.

¿Qué es un asteroide?

Un asteroide es un cuerpo celeste rocoso e irregular que orbita al Sol, pero más pequeño que un planeta, con un diámetro mayor a 1 metro. La mayoría de ellos se encuentran concentrados en el conocido como “cinturón de asteroides”, ubicado entre la órbita de Marte y Júpiter.

Si este tipo de roca que orbita al Sol nunca intercepta a la atmósfera terrestre, reciben el nombre de meteoroide. En el caso de que tome contacto con nuestra atmósfera penetrando a altísima velocidad, se calienta debido a la fricción con el aire tomando el nombre de meteoro. Si el meteoro no se desintegra por completo y parte de sus restos logran llegar a la superficie terrestre, se convierte en un meteorito.

Los asteroides que han impactado la Tierra nos recuerdan la constante interacción entre nuestro planeta y el espacio exterior. Desde los espectaculares bólidos que iluminan el cielo hasta los imponentes meteoritos que modifican la superficie, cada uno de estos eventos proporciona una ventana única al cosmos.

Meteoritos en Argentina

Argentina es un país con una rica historia de descubrimientos de meteoritos. Su vasto territorio y diversidad geológica han permitido encontrar numerosos meteoritos, algunos de ellos de gran tamaño y relevancia científica.

El campo de meteoritos más famoso de Argentina es Campo del Cielo, ubicado en la provincia de Chaco. Este sitio alberga una de las concentraciones de meteoritos más grandes del mundo. Estos se originaron hace aproximadamente 4 mil años, cuando un asteroide se fragmentó en la atmósfera y sus restos impactaron la región.

Hasta el momento, el cráter más grande del predio Campo de Cielo tiene 50 metros de diámetro. El espacio, que cuenta con 20 mil kilómetros cuadrados de extensión, tiene unos 27 cráteres con sus correspondientes meteoritos.

Descubierto el 1 de agosto de 1969 por Raúl Gómez, y bautizado como “El Chaco”, debe su nombre a la provincia en cuyo territorio fue hallado. En 1980 William Cassidy comenzó las excavaciones en el lugar y extrajo, con la colaboración de la Fuerza Aérea Argentina, esta gran masa metálica extraterrestre.

Los cálculos de carbono 14 sitúan la caída entre los años 1080 y 191 a.C. El meteorito El Chaco ingresó con ángulo de 9° respecto al horizonte dejando un cráter elíptico por cono de penetración, tal cráter tiene un túnel de unos 16 metros quedando enterrado el objeto a 5.5 metros de profundidad. La altura del meteorito es de 2,20 metros. Este meteorito gigante está compuesto por un 93 % de hierro y un 7 % de otros metales.

Otro meteorito destacado de la región es el “Gancedo”, descubierto hace poco tiempo, el 10 de septiembre de 2016, por un equipo de exploradores de la Asociación de Astronomía del Chaco en la cercanía de la localidad de Gancedo, en el sudoeste chaqueño.

Según los primeros estudios, pesa aproximadamente 30.800 kilogramos, convirtiéndolo en el meteorito más grande hallado en América, y el segundo a nivel mundial. Con su descubrimiento, desplazó en el ranking a su homólogo y vecino, meteorito El Chaco.

Este meteorito gigante está compuesto por 92,6 % de hierro, 6,7 % de níquel y 0,6 % de cobalto. Su descubrimiento fue un hito importante para la comunidad científica y despertó un renovado interés en la región.

La exploración y el estudio de los meteoritos continúan siendo una aventura fascinante para la humanidad. Cada descubrimiento nos acerca un poco más a comprender los misterios del universo y nuestro lugar en él. Mantener la mirada en el cielo y explorar los tesoros que caen de él seguirá siendo una fuente inagotable de conocimiento y asombro.