El huracán Michael dejará consecuencias catastróficas en el sudeste de EEUU
Michael se intensificó rápidamente sobre las aguas del Golfo de México, el poderoso huracán mayor ahora apunta a la península de la Florida. Se esperan consecuencias dramáticas en al menos seis estados del sudeste de los EEUU, con decenas de condados bajo la orden de evacuación obligatoria.
El pasado lunes Michael era un huracán de categoría 1, (en la escala Saffir-Simpson, para la intensidad de ciclones tropicales con un máximo de 5), se ubicaba entre la península de Yucatán y la costa oeste de Cuba. En menos de 48 horas y avanzando hacia el norte a través del canal de Yucatán, y luego sobre las agua cálidas del este del Golfo de México, se intensificó velozmente llegando a categoría 3 en la tarde de martes, con vientos de 195km/h. Esto lo convierte en un huracán “mayor”, (así se clasifican todos los huracanes que logran tener viento máximo sostenido superior a 177 km/h).
En las primeras horas de este miércoles, y según el último boletín oficial del Centro Nacional de Huracanes (por sus siglas en inglés, NHC), Michael se ha intensificado aún más, ahora con vientos máximos sostenidos de 220 km/h, (y ráfagas superiores), alcanza categoría 4. Su ojo, con una presión central de 937 hpa se encuentra a tan solo 225 km al sur-sudoeste de Panamá City, Florida, se mueve hacia el norte a 20 km/h.
Las bandas exteriores del huracán ya se hacen sentir en el oeste y norte del estado de Florida, dado que los vientos de intensidad de tormenta tropical se extienden hasta los 295 km, y los de intensidad de huracán en una distancia de hasta 75 km del ojo.
Momento crítico
Durante la mañana de miércoles, según el NHC, Michael mantendrá su categoría de "huracán mayor", avanzando directamente hacia la costa. Se espera que en la tarde de este mismo día, el ojo del poderoso ciclón tropical toque tierra en la costa noroeste de Florida, sobre Panhandle o Big Dobla. Ambos recibieron por parte de las autoridades la orden de evacuación obligatoria, junto a otros casi 40 condados, dada la severidad del fenómeno natural.
En el transcurso de la noche de miércoles el sistema irá perdiendo intensidad, bajará de categoría velozmente a medida que se mueva por tierra firme. Tomará una dirección de trayectoria hacia el noreste, atravesando los estados de Georgia y las Carolinas. Aunque la intensidad de las ráfagas de viento serán de menor potencia, Michael seguirá generando lluvias torrenciales como tormenta tropical, hasta que finalmente el viernes se aleje de EEUU, sobre el Océano Atlántico.
Escenario muy complicado
Se esperan consecuencias devastadoras con el avance de este día a medida que se aproxime a tierra firme. Violentas ráfagas de viento, acompañadas de lluvias torrenciales estarán vigentes hasta el viernes. El NHC estimó una cota de hasta 300 mm acumulados, pudiendo ser superada puntualmente, sumadas a la marejada ciclónica de hasta 4 m y el importante oleaje, generarán inundaciones repentinas sumamente peligrosas, que ponen en riesgo la vida de las personas.
Nuevamente el sudeste de los EEUU
El sudeste de los EEUU aún no termina de reponerse del huracán Florence que hace menos de un mes lo azotó con violencia de categoría 1. Daños materiales millonarios, más el triste saldo de 34 personas y millones de animales muertos aún pesan en la población, que ahora se está preparando para un nuevo duro golpe de la naturaleza, el huracán Michael.
El presidente de los EEUU, Donald Trump, emitió una declaración de estado de emergencia para Florida; el gobernador Rick Scott dijo: “Esta podría ser la tormenta más devastadora que haya afectado Florida en décadas. Es su última oportunidad para prepararse para esta tormenta monstruosa y mortal".
Consecuencias en Latinoamérica
Previo a convertirse en huracán, el pasado fin de semana el mismo ciclón tropical azotó Honduras, allí dejó un saldo de 13 muertos, además de importantes daños materiales por las inundaciones y las ráfagas de viento.
A principio de esta semana, el ciclón tropical dejó lluvias muy intensas y fuertes vientos con ráfagas violentas en la zona costera de la península de Yucatán, (suspendieron las clases en Quintana Roo), y además el oeste de Cuba, con decenas de evacuados, padeció las consecuencias de Michael.