El volcán más grande de la Tierra podría entrar en erupción
Los últimos estudios geodésicos del volcán Mauna Loa describen nuevos movimientos en sus fallas y un aumento en su volumen magmático: síntomas de una posible erupción.
Los científicos de la Escuela de Ciencias Marinas y Atmosféricas de la Universidad de Miami (UM) estudian a través de datos satelitales del Radar de Apertura Sintética Interferométrica, junto con estaciones de GPS operadas por el Observatorio de Volcanes de Hawái, la evolución del supervolcán Mauna Loa. Tras varios años de seguimiento han descubierto cambios importantes en su estructura.
Los resultados indican que la cumbre del Mauna Loa se ha elevado sobre el terreno a razón de 6 centímetros al año en el periodo 2014-2020. Según explica el doctorando Bhuvan Varugu de la UM, el crecimiento del volcán se debe al movimiento del magma a lo largo de una falla en el flanco occidental. Este estrés impartido por la afluencia del magma se aliviaría con un terremoto de magnitud 6 o mayor, desencadenando una posible erupción.
Además, el estudio concluye que el volumen de magma acumulado en el Mauna Loa desde el 2002 es de 0,2 km3, acercándose a la magnitud que obtuvo en su última erupción registrada en el año 1984.
A estas alturas todos nos estaremos haciendo la misma pregunta: ¿El volcán entrará en erupción en un futuro próximo? Según afirma Varugu, "si continúa la afluencia de magma, es probable, pero no obligatorio".
Una erupción volcánica de esa magnitud, ¿afectaría al clima terrestre?
Las erupciones volcánicas pueden alterar el clima del planeta según su índice de explosividad volcánica. En una escala de 8 grados, los volcanes que superen el nivel 5 tiene el poder suficiente para cambiar el clima mundial.
Para que esto ocurra la erupción debe emitir más de 20 millones de toneladas de dióxido de azufre e inyectar material en la estratosfera. Estas partículas situadas en la segunda capa de la atmósfera actúan como espejos, reflejando la radiación solar de vuelta al espacio y evitando que alcance la superficie terrestre, dando lugar a una disminución de la temperatura global.
Cabe destacar que los cambios en el clima ocasionados por los volcanes son muy importantes sobre todo en el actual contexto de cambio climático, donde la evidencia científica indica que la temperatura media del planeta continuará aumentando durante los próximos años. Erupciones como las que se prevé del Mauna Loa, podrían contribuir, en parte, a mitigar este calentamiento, aunque los efectos no suelen duran más de dos a tres años.