Encontraron por primera vez microplásticos en la sangre humana
Los microplasticos ya se habían documentado en el aire, lagos, alimentos y hasta en la cima del Monte Everest. El nuevo hallazgo es descrito como “extremadamente preocupante”.
Los microplásticos son pequeñas piezas de plástico de menos de 0,2 pulgadas (5 mm) de diámetro, que suelen producirse como desprendimiento o residuo de materiales que se desechan sin el correcto tratamiento. Por primera vez, se los ha encontrado en la sangre humana, según una investigación holandesa que encontró partículas diminutas en el 77 % de los participantes de un estudio.
Investigadores de la Vrije Universiteit (Universidad Libre) de Ámsterdam describen el hallazgo como "extremadamente preocupante" porque las partículas diminutas pueden viajar por el cuerpo a través del torrente sanguíneo y alojarse en los órganos internos.
El equipo analizó 22 muestras de sangre de donantes sanos y descubrió que 17, casi el 80%, contienen microplásticos. Estos pueden ingresar al cuerpo a través de la inhalación de partículas en el aire o la ingestión, ya sea en alimentos o envases de plástico.
El profesor Dick Vethaak afirmó a The Guardian que su estudio, titulado "Descubrimiento y cuantificación de la contaminación por partículas plásticas en la sangre humana", publicado en la revista Environment International, muestra un resultado innovador y es la primera documentación de que los humanos tienen polímeros plásticos en el torrente sanguíneo.
Los resultados asombrosos del estudio
Para llegar a estas conclusiones, el equipo de trabajo desarrolló un método analítico para establecer el nivel de trazas de partículas micro y nanoplásticas en la sangre humana. El método se aplicó a la sangre de 22 donantes anónimos y se examinó para detectar la presencia de cinco polímeros diferentes, los componentes básicos de cinco tipos de plástico común, incluidos PET, polipropileno y poliestireno. También se determinó el grado de presencia de cada uno de los polímeros en la sangre.
Sólo el 23% los donantes analizados no tenía cantidades detectables de partículas de plástico de ningún tipo. El tereftalato de polietileno (PET), el polietileno y los polímeros de estireno fueron los tipos de plástico más comunes encontrados en las muestras de sangre, seguidos del polimetilmetacrilato; también se analizó el polipropileno, pero las concentraciones eran demasiado bajas para una medición precisa.
Vethaak, reconoció que la investigación era un primer paso y debería ampliarse a una muestra más grande. “Se necesita mucha más investigación para entender lo que significa. Sabemos que el plástico está en nuestro cuerpo, pero ¿a dónde va y qué hace?”, señaló el investigador.