Hawaii en alerta roja por el paso del huracán Lane
Un mar embravecido por la fuerza del viento, lluvias torrenciales con inundaciones repentinas y destructivos deslizamientos de tierra, son el escenario que se repite en Hawaii al menos en las últimas 72 horas. El responsable de mantener bajo alerta máxima al archipiélago, es el huracán Lane.
Este enorme ciclón se inició como depresión tropical el 15 de agosto, doce horas después se intensificó convirtiéndose en la tormenta tropical Lane. Con movimiento sobre el Océano Pacífico Central se profundizaba sobre aguas cálidas, bien alejado de tierra firme, hasta convertirse en huracán el 17 de agosto superando los 118 km/h.
Lane comenzó una rápida intensificación, los modelos pronosticaban su trayectoria con una alta probabilidad de que se aproxime peligrosamente a Hawaii. Aunque todavía no estaba del todo claro su futuro recorrido, se comenzaba a monitorear seriamente la evolución del sistema.
La potencia de "Lane"
El 22 de agosto el huracán Lane llegó a ser categoría 5, (la más intensa según la escala Saffir-Simpson), consigue alcanzar vientos máximos de 260 km/h, según los datos tomados por los aviones cazahuracanes que penetraron el ojo.
Esto convierte a Lane en el huracán más fuerte en lo que va de la temporada de huracanes 2018, y superó en intensidad de viento al recientemente disipado huracán Héctor.
El poderoso huracán se aproxima a Hawaii
Debido a las declaraciones de emergencia emitidas por las autoridades, más de 2000 personas acudieron a los centros de evacuación. El presidente Donald Trump decretó desde el jueves el estado de emergencia para Hawaii, ese día se registraron las primeras lluvias torrenciales en la Isla Grande con 305 mm y vientos superiores a 215 km/h.
En las siguientes 72 horas Lane se desplazó hacia el norte-noroeste, justamente en dirección hacia las islas hawaianas. Si bien había perdido intensidad, (era ahora categoría 2), las principales zonas habitadas del archipiélago se mantenían en alerta.
Residentes y turistas hacían largas filas en las gasolineras y los supermercados con sus góndolas ya prácticamente vacías. Hawaii se preparaba para el peor escenario.
Consecuencias por el paso del ciclón tropical
El huracán Lane no llegó a atravesar las islas, pero se ubicó lo suficientemente cerca como para generar consecuencias destructivas. Lluvias torrenciales acompañadas de ráfagas de viento, azotaban las islas del sur y se provocaban deslizamientos e inundaciones catastróficas.
A las 18UTC del viernes, Lane a 274 km de Honolulú (la ciudad más poblada), se desplazaba muy lentamente (a 5 km/h aproximadamente), con vientos de 170 km/h. La velocidad de las ráfagas es clave en el grado de destrucción que puede causar pero, al moverse tan lentamente todo el sistema, los eventos de lluvia se prolongan por más tiempo en una misma zona, causando importantes daños. Fuertes aguaceros produjeron desprendimientos de tierra y lodo, con inundaciones incluso en áreas habitualmente poco vulnerables.
El relieve montañoso de Hawaii hace que la tormenta sea extremadamente peligrosa, las lluvias torrenciales por varios días traen como principal problema los aludes, potencialmente mortales.
Las próximas horas son claves
Este viernes, Lane se ha degradado a tormenta tropical, pero aún tiene en vilo a las islas.
Según el último boletín del Centro Nacional de Huracanes del Pacífico (CPHC, por sus siglas en inglés), ahora mismo Lane con vientos de 100 km/h, está a 220 km al sur-sudoeste de Honolulú, con presión mínima de 992 hpa, y se mueve muy lentamente a 4.8 km/h hacia el norte-noroeste.
Las bandas de lluvia exteriores pueden producir inundaciones graves este fin de semana, afectarán a: Oahu, Maui e Isla Grande. Las condiciones de tormenta tropical son posibles en Kauai a partir de hoy. Se esperan lluvias de 250/500 mm, y hasta 1000 mm totales a barlovento en la Isla Grande y fuertes deslaves.