Increíble: ¡esta azafata sobrevivió al accidente de su avión y a una caída libre de más de 10.000 metros!
¿Podría esta azafata yugoslava haber sobrevivido realmente al accidente de su avión y a una caída libre de más de 10.000 metros sin paracaídas? Esta es la historia de Vesna Vulovic.
El 26 de enero de 1972, un acontecimiento extraordinario sacudió el mundo de la aviación e hizo tambalearse las nociones de supervivencia y destino.
Vesna Vulovic, una azafata yugoslava, sobrevivió a una caída desde 10.160 metros (33.330 pies) sin paracaídas después de que el vuelo 367 de JAT Yugoslav Airlines explotara en el aire.
Un día fatídico
Ni siquiera se suponía que Vesna Vulovic estuviera en ese vuelo ese día. Confundida con otra azafata con el mismo nombre, se encontró a bordo del vuelo 367 de Estocolmo a Belgrado con escala en Copenhague.
Poco después de despegar de Copenhague, una explosión partió el avión en tres sobre Checoslovaquia (actual República Checa), tras la detonación de una bomba en el compartimento de equipajes. Vesna quedó atrapada en la parte trasera del avión, lo que desempeñó un papel crucial en su supervivencia.
La azafata milagrosamente salvó su vida
Caer en una zona boscosa y nevada probablemente amortiguó el impacto, y su presión arterial baja, debido a su historial de presión arterial baja, fue un factor clave para sobrevivir al impacto. Fue encontrada por el residente local Bruno Honke, quien le proporcionó primeros auxilios esenciales.
Vesna sufrió múltiples fracturas, incluida fractura de cráneo, vértebras, piernas y pelvis, así como una hemorragia cerebral. Pasó varios días en coma, pero se recuperó sorprendentemente y logró caminar nuevamente después de diez meses, aunque con discapacidad permanente.
Heroína nacional
De regreso a Yugoslavia, Vesna se convirtió en una heroína nacional. Continuó trabajando para JAT en un puesto administrativo, pero fue despedida a principios de la década de 1990 por su oposición al régimen de Slobodan Milošević.
Vesna ostenta actualmente el récord mundial de la caída libre más alta sin paracaídas a la que ha sobrevivido un ser humano.