India: Nueva Delhi vivió semanas con aire irrespirable por los insalubres niveles de contaminación
La última quincena de octubre y los primeros días de noviembre fueron días de contaminación extrema en Nueva Delhi. Los valores de contaminación superaron más de 10 veces lo establecido como aceptable. La contaminación industrial, los automóviles, y la quema de rastrojos detrás de esta compleja realidad.
La contaminación en gran parte del norte de India ha sido extrema en las últimas semanas, con índices altamente perjudiciales para la salud humana. Si bien el fin de semana pasado los valores mejoraron luego de algunas lluvias, lo cierto es que el panorama ha sido desolador en un país que ve cómo esta realidad está lejos de solucionarse, porque en realidad no se hace nada para lograr un cambio concreto.
A la contaminación industrial se sumaron algunos incendios que empeoraron la situación. Se trata de incendios que estuvieron activos en Punjab y Haryana. Son producto de la quema indiscriminada de rastrojos en el ámbito de la agricultura, una técnica ancestral que está lejos de desterrarse. Hay que tener en cuenta que la enorme barrera que suponen los Himalayas al norte hace que bajo ciertas condiciones de circulación meteorológica las chances de ventilación atmosférica son casi nulas.
Más allá de los modelos globales sobre dispersión de contaminantes, India no cuenta con ningún tipo de estimación basada en modelos que aporten datos sobre la contribución de la quema de rastrojos a la contaminación atmosférica de Delhi. Esto hace difícil decir si el humo de los fuegos encendidos contribuyó o no a la contaminación de los días anteriores. Según relata Hindustan Times, el peor día resultó el pasado 23 de octubre.
Los valores superan ampliamente lo aceptable
La Junta Central de Control de la Contaminación (CPCB), un organismo estatal de seguimiento de la polución en el país, es el encargado de realizar las mediciones en base a las cuales se toman algunas medidas desde lo gubernamental. Durante varios días comprendidos entre la segunda quincena de octubre y los primeros 10 días de noviembre, los valores de contaminación detectados en Nueva Delhi superaron holgadamente los valores a partir de los cuales la contaminación es altamente peligrosa para el ser humano.
Aún con este cuadro de situación, la calidad del aire de Nueva Delhi ha tenido el mejor mes de octubre desde 2016, el año más temprano desde que se analiza este parámetro. El número de incendios activos detectados en el periodo del 1 al 22 de octubre y en la semana que finalizó el 22 de octubre, por otro lado, ha sido el más bajo de este año desde 2016. Es interesante ver cómo aún con esta mejoría la situación está muy lejos de ser aceptable. En la imagen que encabeza la nota se puede notar claramente el nivel de contaminación al que estamos refiriendo.
De todas formas, hay quienes creen que los valores obtenidos subestiman la situación, que en realidad es mucho peor. Por un lado, las mediciones en el terreno son pocas, y eso hace que el valor promedio que se obtiene a la hora de comunicar a la población, no es representativo de la realidad. Por otro lado, el satélite Suomi-NPP adquiere imágenes sobre la India normalmente en dos periodos de 3-4 horas durante un día: una vez hacia el mediodía y otra hacia la medianoche. Es poco probable que el satélite contabilice los incendios de corta duración que se producen fuera de estos periodos.
Escuelas cerradas y hospitales saturados
Esta situación que persiste a lo largo de los años es el resultado de una serie de variables que juegan en conjunto. Por un lado la matriz industrial y el uso de motores con altos niveles de contaminación, y una forma de ejercer la agricultura que sigue utilizando la quema de rastrojos con poca o nula programación. El país está muy lejos de poder erradicar a gran parte de los elementos que dan lugar a los elevados niveles de contaminación.
La circulación atmosférica es determinante, especialmente cuando patrones de alta presión se consolidan sobre el territorio haciendo que la subsidencia resultante aumente la densidad de los contaminantes en niveles cercanos al suelo. A todo esto hay que sumar que Delhi es una de las ciudades más densamente pobladas de mundo. Allí viven alg más de 32 millones de personas en una superficie de apenas 42,7 kilómetros cuadrados.
Todas estas condiciones meteorológicas son las esperables en la estación post-monzónica, tal como indica Nature. En concreto, los niños y mayores con problemas respiratorios saturaron los servicios de urgencias de los hospitales, y las escuelas se han visto obligadas a cerrar. Los peores contaminantes que se encuentran el aire de Nueva Delhi son las partículas finas que no puede filtrar el pulmón, el ozono, y el dióxido de azufre. Por caso, el nivel de partículas muy finas menores superan los 200 microgramos por metro cúbico, mientras que no debería superar los 15 microgramos, de acuerdo a los valores que indica la Organización Mundial de la Salud.