Lluvias de estrellas en 2022, ¿cuándo y cuáles se verán mejor?
La Luna es uno de los principales obstáculos para la observación de las lluvias de estrellas. ¿En qué fechas caerán en 2022? ¿Cuáles serán las más importantes? ¿Se podrán ver bien? Aquí respondemos tus dudas.
El año 2022 se presenta repleto de citas astronómicas. Si hablamos de lluvia de meteoros, las primeras de la lista fueron las cuadrántidas, que dieron el pistoletazo de salida de este año. Ahora bien, en los próximos meses las lluvias de estrellas dejarán ensimismado a más de uno, si la Luna y las condiciones meteorológicas lo permiten.
Más lluvias de estrellas en otoño y primavera
De acuerdo con el Instituto Geográfico Nacional (IGN), no será hasta el otoño cuando podamos ver otro espectáculo de luces de esta magnitud. Serán las líridas y después las eta acuáridas, que apenas llegarán a los 50 meteoros por hora. Las que tendrán mayor visibilidad serán las eta acuáridas la noche del 5 al 6 de mayo. Esa misma noche, la Luna se encontrará en su fase de cuarto menguante, por lo que no brillará mucho, facilitando la observación de este espectáculo.
En invierno, las delta acuáridas y las perseidas decorarán las noches más frías del año en el hemisferio sur. Ahora bien, las conocidas como "Lágrimas de San Lorenzo" no se dejarán ver tan fácilmente, incluso será difícil. Durante la noche del 12 al 13 de agosto nuestro satélite se encontrará en su fase de luna llena, por lo que brillará en todo su esplendor.
¿Tendremos más suerte en primavera? Se trata de tal vez la época más esperada por los amantes de la astronomía. Las dracónidas, las oriónidas, las leónidas y las gemínidas serán las protagonistas del cielo nocturno. De todas ellas, solo las últimas superarán los 120 meteoros por hora.
Las de la constelación de Géminis serán las más importantes, incluso si incluimos a las úrsidas, las últimas del año. El problema es que la Luna se encontrará en su fase cuarto creciente, por lo que la visibilidad puede que no sea tan buena la noche del 14 al 15 de diciembre.
La Luna y el estado del cielo pueden dificultar la observación
Las estrellas fugaces y los meteoros más comunes que observamos en el cielo, son partículas de unos milímetros a unos centímetros de tamaño, que se queman a 100 kilómetros de altitud. Todos ellos se calcinan en nuestra atmósfera, generando un destello visible desde tierra firme.
En estos casos, la Luna juega un papel muy importante. La visibilidad de estos meteoros depende tanto de nuestro satélite como del estado del cielo de ese mismo día. Lo mejor para poder ver alguna estrella fugaz será buscar el cielo más oscuro posible, y desviar nuestra mirada hacia el lado opuesto a la Luna. Para ello, la Agenda Astronómica nos puede servir de ayuda.