Lluvias excepcionales en el desierto del Sahara podrían indicar cambios en el sistema climático del planeta
El desierto del Sahara se enfrenta a lluvias de entre un 500 y un 1000 % por encima de los valores climáticos. Es la lluvia de más de 5 años en menos de 2 meses. La comunidad meteorológica aún estudia los eventos detrás de esta situación anómala que también afecta a la temporada de huracanes en el Atlántico.
Cuando pensamos en el Sahara imaginamos rápidamente una de las zonas más secas y com memos lluvia de todo el planeta. Las condiciones de circulación en esa zona habitualmente inhiben los procesos que llevan a las precipitaciones. Ahora, de manera sorprendente para muchos en la comunidad meteorológica, el desierto está teniendo tormentas y chaparrones excepcionales que amenazan por mantenerse en las próximas semanas, y que están impactando sobre la temporada de huracanes en el océano Atlántico.
La sequía permanente sobre el Sahara se asocia a movimientos de descenso en la atmósfera conectados a una dorsal persistente en niveles medios de la atmósfera. Este cinturón de altas presiones hacen que las lluvias se presenten en los sectores más cercanos al Ecuador en el continente africano. Ahora, si uno observa los valores absolutos que se pronostican, no parecen grandes cantidades. Pero hay un punto muy importante a considerar si se los compara con los valores climáticos.
Tal como indica Severe Weather Europe, una gran parte del Sahara recibirá más del 500 % de las precipitaciones mensuales normales desde finales de agosto y en septiembre. Este tipo de eventos son poco frecuentes, algo así como una vez por década. Pero en este caso de una intensidad que no se ha visto en las últimas décadas. Muchos meteorólogos coinciden en observar una señal de que algo esté cambiando en el sistema global, lo que indica un estado inusual de la atmósfera.
El Sahara una vez fue un lugar de mucha vegetación
En algún momento de la historia, entre unos 6000 y 11000 años atrás, el Sahara fue una región verde, con ríos, y abundante vegetación. Luego de pequeños cambios en la inclinación del eje terrestre, esto fue cambiando, y la zona de convergencia intertropical (ITCZ) quedó relegada más al sur. La ITCZ es la zona donde converge la circulación de ambos hemisferio, y su ubicación está relacionada con el patrón de lluvias en el desierto.
Este año esta zona de convergencia está más al norte, llevando lluvias al Sahara. Pero al mismo tiempo, de la ITCZ se desprenden perturbaciones que luego viajan con los vientos alisios hacia el este, y se relacionan con los sistemas tropicales que se desarrollan en la temporada de huracanes. Esta ubicación extraordinaria de la ITCZ que lleva lluvias al desierto, por otro lado ha inhibido un mayor desarrollo de huracanes en la cuenca del Atlántico.
Hay que recordar que mucho de esos lugares tienen acumulados promedios no más allá de los 25 mm anuales. Algunos países como Níger, Mali, Chad, Argelia, y el norte de Mauritania, que podrán estar afectados por lluvias intensas, no tienen sistemas de avisos eficientes para las comunidades que viven o transitan esas zonas.
Lluvias excepcionales sobre el desierto
Las zonas desérticas como las que potencialmente estarán afectadas por estas lluvias tienen capacidad reducida de rápida absorción, por lo que los especialistas indican que es probable que la presencia de aire tropical sobre zonas del desierto generen algunas inundaciones. Las zonas desérticas son muy susceptibles de cambios, aun menores, en el sistema climático global.
Un interesante estudio realizado en 2016 publicado en Science Daily daba cuenta del proceso que hizo que el Sahara pasara de ser una región verde y húmeda al desierto que es hoy. Elementos de la circulación como la ITCZ y las corrientes en chorro en latitudes media definen gran parte del sistema climático en superficie. Cualquier modificación en su comportamiento es parte de los cambios que pueden afectar a todo el planeta.
La mayoría de los modelos de pronóstico indican que este patrón de circulación podría mantenerse durante gran parte de septiembre. Esta situación plantea la pregunta si alteraciones de este tipo podrían ser más frecuentes, y como generarían un efecto mayor a nivel global. Algo importante, por ejemplo, es que este corrimiento de la ICTZ también ha ayudado a desarrollar tormentas inusualmente severas sobre el sudoeste de Arabia Saudita, casi en forma diaria en los últimos 40 días.
Referencia de la noticia:
Texas A&M University. "6,000 years ago the Sahara Desert was tropical, so what happened?." ScienceDaily. ScienceDaily, 30 November 2016. .