Las nevadas se recrudecen en Europa debido al deshielo en el Ártico

Puede parecer una incongruencia, pero la revista Nature ha publicado un interesante estudio que relaciona el aumento de las temperaturas en el Ártico con mayores nevadas en Europa.

Polonia nevado
Menos hielo en el Ártico puede provocar más nevadas en Europa.

A estas alturas, y tras tantos estudios publicados y difundidos por los medios de comunicación, a nadie se le escapa que mucho de lo que pasa en la Tierra acaba teniendo efectos globales. Tenemos en mente eso de que el aleteo de una mariposa puede provocar un huracán en otra parte del mundo, aunque a algunos nos gusta ser un poco más realistas.

Al ser humano aún le queda mucho por descubrir. Por esto no dejamos nunca de investigar, tanto nuestro cuerpo como el lugar en el que vivimos: nuestro planeta. Incluso nos gastamos millones y millones de euros en buscar otros mundos y obtener más conocimientos. Dinero bien invertido porque por el camino vamos descubriendo nueva tecnología que aplicamos posteriormente a nuestra vida diaria.

El pasado 1 de abril la prestigiosa revista Nature ha publicado un estudio que explica, evidentemente con datos, un hecho que puede parecer contradictorio: un aumento de las temperaturas en algunas regiones puede provocar más nevadas en otras. Estamos hablando del Ártico.

La humedad, clave

El estudio viene a demostrar un hecho del que ya se ha hablado más de una vez: la pérdida de hielo marino en el Ártico fruto del calentamiento global se ha relacionado con inviernos más fríos y con más nevadas en latitudes medias. Pero... ¿cuál es la explicación?

"La Bestia del Este" fue una ola de frío que afectó a gran parte de Europa y provocó 95 muertes en varios países.

Para poder dar coherencia a este hecho se analizaron los datos del famoso episodio que tuvo lugar en Europa en febrero de 2018 y que fue bautizado como “La Bestia del Este”. Analizaron cómo un mar de Barents anormalmente cálido con un 60% de superficie libre de hielo aportó más humedad al flujo de aire del noreste.

Mar de Barents
Un Mar de Barents con menos hielo aporta más humedad atmosférica.

Concretamente, el estudio demuestra que aproximadamente 140 gigatoneladas de agua se evaporaron del mar de Barents durante ese evento, proporcionando hasta un 88% de la nieve fresca que cayó en el norte de Europa. No solo se quedan con el dato del episodio de 2018. Los datos que presentan muestran que de 1979 a 2020 la evaporación neta del mes de marzo a través del mar de Barents ha aumentado aproximadamente 70 kg por cada metro cuadrado de hielo perdido, unos 1,6 mm más de nieve al año, el equivalente en agua.

Qué se espera en el futuro

A pesar de que muchos tenemos la sensación de que el cambio climático equivale a cada vez más calor, menos lluvia y menos nieve, no siempre es así. De hecho, en el Mediterráneo puede que los temporales sean más violentos en un futuro.

Este nuevo estudio nos demuestra cómo hay una estrecha vinculación entre la pérdida de hielo marino del Ártico con el aumento de la evaporación y las nevadas extremas. Confirman, además, que si todo sigue así, en 2080, con un Mar de Barents sin hielo, será una fuente importante de humedad invernal para la Europa continental.