10 parajes naturales poco conocidos en la Patagonia argentina que vale la pena visitar al menos una vez
Son sitios que ofrecen naturaleza y tranquilidad en entornos alejados de los destinos más turísticos, siendo ideales para quienes buscan una experiencia auténtica en esta región.
La Patagonia argentina es una región vasta y diversa que ofrece una amplia variedad de paisajes y actividades: con infinidad de parajes naturales, los visitantes pueden descubrir esta zona desde una perspectiva diferente, alejándose de los destinos más turísticos y disfrutando de la tranquilidad y belleza de lugares poco explorados.
A continuación, algunos de los sitios menos conocidos y menos turísticos que podrían interesarte en las provincias de La Pampa, Neuquén, Río Negro, Chubut y Santa Cruz.
1. Laguna de Utracán (La Pampa)
Se trata de una reserva natural municipal que alberga un cuerpo de agua rodeado de vegetación, ideal para avistamiento de aves, pesca y disfrutar de la tranquilidad en medio de la naturaleza.
Considerado un refugio para la biodiversidad, este sitio turístico resulta una gran alternativa tanto para la recreación a través de senderos y el descanso al aire libre como para la práctica de deportes náuticos como canotaje, kayak, kitesurf, entre otros.
¿Cómo llegar? La Laguna de Utracán se encuentra ubicada a 90 km al sur de la ciudad de Santa Rosa y a 15 km de Gral. Acha por Ruta Nacional 152 y luego Ruta Provincial 9.
2. Salinas Grandes de Hidalgo (La Pampa)
Las Salinas Grandes de Hidalgo están ubicadas al este de la provincia de la provincia de La Pampa, cerca de Macachin. Este sitio es destacado desde lo histórico por haber sido uno de los principales puntos de asentamiento aborigen del territorio pampeano.
Aquí es posible descubrir la extracción y comercialización de la sal que dio lugar primero a asentamientos de pueblos originarios y luego de inmigrantes, razón por la cual es declarado Lugar Histórico Provincial.
En paralelo, en este sitio se hallaron los restos paleontológicos de Argentavis Magnificens, considerado el ave más grande del mundo.
3. Salto del Agrio (Neuquén)
El Salto del Agrio está ubicado a 10 kilómetros de Caviahue, accesible por la Ruta provincial 27 en la provincia de Neuquén.
Esta imponente cascada de más de 45 metros de altura se encuentra enmarcada en un amplio cañón formado por sucesivas coladas de lava, producto de la antigua actividad volcánica en la zona.
En este sitio es posible observar una paleta de colores que va desde el rojo ferruginoso hasta el verde azufrado, creando una fusión visual única en las rocas adyacentes y el lecho del Río Agrio. Por su ubicación solitaria y una belleza cautivante, es uno de los sitios más admirados para fotografiar en la Patagonia.
4. Parque Nacional Laguna Blanca (Neuquén)
El Parque Nacional Laguna Blanca es un área natural protegida ubicada en el departamento Zapala, en el centro oeste de la provincia de Neuquén.
Tal como su nombre lo indica, este sitio contempla la presencia de una laguna salina que, por su extensión de poco más de 11.000 hectáreas, es de gran importancia para la avifauna, en especial para los flamencos.
Sin dudas, es un gran atractivo para admirar antiguos conos volcánicos, paisajes desérticos y una enorme laguna con aves acuáticas y migratorias. La mejor temporada para el turismo en esta zona es entre los meses de noviembre a marzo.
5. Lago Baggilt (Chubut)
Se trata de un lago de origen glaciario ubicado en la Cordillera, situado precisamente en el departamento Futaleufú y cerca de la localidad de Esquel.
Declarado como Área Natural Protegida, el Lago Baggilt se ubica a 1000 metros sobre el nivel del mar, en medio de los bosques más prístinos de la región. Accesible sólo mediante una caminata, se trata de un lugar remoto y tranquilo para andar e ideal para los aficionados del trekking y la pesca.
Debe su nombre a Bagillt, el pueblo homónimo del país de Gales que está situado en el condado de Flint, de donde era oriundo Edward Jones, el descubridor de este sitio.
6. Valle de los Altares (Chubut)
El Valle de los Altares, conocido también como Valle de las Ruinas, es un valle con imponentes formaciones rocosas ubicado en el centro de la provincia de Chubut: las mismas se alzan como altares naturales a lo largo de la Ruta Nacional 25.
Este atractivo natural es recorrido por el curso medio del río Chubut, ubicándose a casi 200 km al oeste de la ciudad de Rawson y a unos 150 km al este de la ciudad de Tecka. Con una extraña formación rocosa, simuladora de altares y tótem naturales, esta escena se asemeja a un paisaje jurásico ideal para realizar caminatas y safaris fotográficos.
7. Lago Guillelmo (Río Negro)
Ubicado cerca de la bellísima San Carlos de Bariloche, este es un lago más pequeño y menos conocido que los populares de la región, ofreciendo aguas cristalinas y una atmósfera más que tranquila para quienes buscan escapar de las multitudes.
¿Cómo llegar? Este lago se encuentra a 35 kilómetros del centro de Bariloche a través de la Ruta 40 sur, más próximo a Villa Mascardi, un poblado eminentemente turístico. Por su cercanía a estos centros urbanos, Lago Guillelmo es una buena alternativa para pasar el día, acampar o intentar suerte con la pesca.
En cuanto a actividades, a orillas de este lago de origen glaciar es posible acampar en la zona de camping libre o en el camping Las Carpitas, y se trata de un ámbito ideal para la pesca deportiva de grandes truchas, de hasta 1.5 kg.
8. Cascada Los Alerces (Río Negro)
Se trata de un salto de 20 metros de altura en el río Manso, cerca del lago Hess. Bautizado como Cascada Los Alerces por la presencia de ejemplares de alerces alrededor, este atractivo se aprecia desde un amplio mirador, rodeado de altos Coihues y paredes con helechos y musgos.
Es una cascada hermosísima así como todo su entorno natural alrededor para llegar a ella. Los locales aconsejan realizar su visita en conjunto con un tour al Cerro Tronador, el cerro más alto de los alrededores de Bariloche y el único que permanece blanco durante todo el año debido a los glaciares que posee en su cumbre.
9. Bosque Petrificado de Jaramillo (Santa Cruz)
Si bien no podríamos considerarlo un sitio poco conocido en la Patagonia, sí es cierto que quizás no resulta de las atracciones más concurridas en la zona, aún a pesar de las singulares características naturales que en su interior se conservan.
El Parque Nacional Bosque Petrificado de Jaramillo es un bosque petrificado protegido en el noreste de la provincia de Santa Cruz, creado en diciembre de 2012 con el objetivo de aumentar la protección del monumento natural Bosques Petrificados.
¿Cómo llegar? Este sitio se encuentra a 290 km de Comodoro Rivadavia (Chubut), a 250 km de Puerto Deseado (Santa Cruz) y a 232 km de Puerto San Julián (Santa Cruz). El acceso es por Ruta Nacional 3 (asfaltada) hasta el empalme con la Ruta Provincial 49, desde aquí son alrededor de 50 km de ripio hasta llegar a la entrada y la oficina del guardaparque.
10. Laguna de los Témpanos (Santa Cruz)
La Laguna de los Témpanos es la desembocadura del Valle del Río Lácteo, por lo que se la conoce con este nombre porque allí es donde flotan enormes bloques de hielo provenientes del valle glaciar.
Ubicada en la reserva natural Laguna Nimez, la Laguna de los Témpanos es un paraje remoto con espectaculares vistas de glaciares. Desde este punto geográfico, los visitantes se encontrarán al pie del cerro más alto de la provincia: el Cerro San Lorenzo, de 3706 msnm y caracterizado por glaciares colgantes.
Este atractivo forma parte de senderos y trekking fascinantes para realizar dentro del Parque Nacional Perito Moreno.