Parque Nacional Los Alerces: brigadistas luchan contra el fuego ante condiciones climáticas desfavorables
En sólo 5 días se quemaron casi 2000 hectáreas de bosque nativo. El Gobernador de la provincia de Chubut, Nicolas Torres, aseguró que se trataría de un hecho intencional y pidió una “fuerte investigación” para castigar a los responsables.
La lucha contra el fuego en el Parque Nacional Los Alerces no cesa y ya lleva cinco jornadas de trabajo intenso por parte de brigadistas, pilotos y personal de apoyo. Las altas temperaturas y los fuertes vientos -en una topografía escarpada- complejizan las tareas y a pesar de los máximos esfuerzos, el incendio arrasa con todo a su paso.
Según los reportes oficiales emitidos por la provincia de Chubut, hasta el lunes por la noche se habían consumido 1893 hectáreas de bosque. El fuego ya afectó las áreas protegidas y también tierras de jurisdicción provincial, por lo tanto se presume que la superficie afectada es aún mayor.
La situación es compleja porque cuando hay viento el fuego se aviva y multiplica las hectáreas arrasadas de manera exponencial; pero cuando no lo hay se produce un estancamiento del humo que disminuye la visibilidad al mínimo e impide la operación de los medios aéreos.
Mientras tanto, desde el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) confirmaron que hay desplegados en la zona de desastre ecológico cerca de 100 brigadistas, 2 aviones turbohélices AT-802 con 3000 litros de capacidad de descarga de agua, 2 helicópteros Bell, uno 407 y uno 412, aptos para el trabajo con helibalde y 1 avión Cessna 182 de observación, aunque se esperan que arribe más personas durante las próximas horas. También se utilizan drones para monitorear el comportamiento del fuego y rediseñar estrategias en caso de ser necesario.
El fuego se inició con dos focos activos el jueves a la noche en la zona del Arroyo Centinela, a la altura de Bahía Rosales sobre el lago Futalaufquen, a unos 55 kilómetros de la ciudad de Esquel. En ambos casos los incendios se extendieron rápidamente y de 5 hectáreas pasaron a cubrir 65 para luego multiplicarse de manera exponencial a causa de las condiciones climáticas. Todo esto en medio de una ola de calor extremo que experimenta gran parte del país, incluida la región norte de la Patagonia.
Un refugio para la conservación del planeta
El Parque Nacional Los Alerces fue creado en 1937 y declarado Sitio de Patrimonio Mundial Natural por la Unesco en 2017. Ocupa una superficie total de 259.822 hectáreas y es el cuarto en tamaño entre los parques nacionales de Argentina.
Su cercanía a la cordillera permite el desarrollo de un tupido Bosque Andino Patagónico y en la zona de mayores precipitaciones crece una selva Valdiviana donde se destacan los alerces (lahuan). Son arboles milenarios de crecimiento lento, con ejemplares que pueden vivir entre 3000 y 4000 años y medir más de 70 metros de altura.
El 7 de julio de 2017 y después de varios años de cumplimentar con todos los requisitos del comité de evaluación, se confirmó la incorporación del Parque Nacional Los Alerces a la lista de Patrimonio Mundial conferido por la UNESCO.Se lo incluyó por contener “fenómenos naturales superlativo, áreas de excepcional belleza natural e importancia estética” y “los hábitats naturales más representativos y más importantes para la conservación de la biodiversidad”.
Impacto en el turismo
El foco activo se ubica en la zona de la alta montaña, lejos de la ruta 71 que por estos días es muy transitada por los turistas que visitan la zona de los lagos. Sin embargo, ese entorno paradisíaco se convirtió en una zona devastada y asfixiante por la cantidad de humo.
Desde la intendencia del parque nacional advirtieron que no peligra ninguna población cercana a la zona del incendio aunque recomendaron a los turistas y visitantes locales transitar con extrema precaución por las rutas aledañas. Recordaron además que permanecen cerradas las sendas de trekking que conducen al cerro La Torta, El Dedal, Alto El Petiso, Cocinero y La Balsa.