Rusia amenazó a EE.UU. con una peligrosa salida de órbita de la ISS
Luego de la invasión de Rusia a Ucrania, EE.UU. toma sanciones económicas, incluso relacionadas con su programa espacial conjunto. Rusia respondió con frases muy amenazantes sobre la posible caída descontrolada de la ISS.
El pasado 24 de febrero Rusia invadió Ucrania con ataques bélicos, detonaciones y grandes explosiones que se viven desde ese día en la capital Kiev, y tomado por la fuerza también la zona de Chernobyl. En el primer día de la ofensiva rusa han muerto al menos 137 ucranianos, entre ellos varios civiles y más de 310 heridos.
A menos de 24 horas de iniciados estos terribles sucesos, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, expuso que tomarán varias sanciones económicas contra Rusia. Se destacan en su claro discurso frases referidas hacia el presidente de Rusia como: “Putin es el agresor”, “eligió esta guerra” con Ucrania, y ahora “él y este país asumirán las consecuencias.”
Dentro de las sanciones económicas, están las relacionadas con su programa espacial conjunto. Estados Unidos anunció que "se cortarán más de la mitad de las importaciones de alta tecnología de Rusia, en consecuencia esto dará un golpe a su capacidad para modernizar sus fuerzas armadas, su industria aeroespacial e incluso su programa espacial".
Acto seguido, Dmitry Rogozin, el jefe de la Agencia Espacial Federal Rusa (Roscosmos), dijo que: “Si EE.UU. bloquea la cooperación con nosotros, ¿quién salvará a la Estación Espacial Internacional (ISS) de una salida de órbita descontrolada y caerá en los Estados Unidos o Europa? También existe la opción de dejar caer una estructura de 500 toneladas en India y China. ¿Quiere amenazarlos con tal perspectiva?”.
Palabras que realmente estremecen a todas las naciones que tienen en algún momento la trayectoria de la ISS sobre su territorio.
¿Peligra el programa espacial?
El Programa Espacial más importante que existe en la actualidad es el de la ISS. Este laboratorio espacial se mantiene en actividad permanente a 400 kilómetros de altura, orbitando alrededor de la Tierra desde hace más de dos décadas. El programa incluye la cooperación de 20 países, pero por supuesto sus principales actores son Estados Unidos (a través de la NASA) y Rusia (con Roscosmos). También están involucradas las Agencias: Espacial Europea (ESA), Japonesa de Exploración Aeroespacial y la Espacial Canadiense.
Hace algunas semanas te adelantábamos en Meteored que Roscosmos manifestó el descontento por las sanciones que EE.UU. y sus socios de occidente le impusieron a su país, anunciando que perjudicaría a la industria espacial rusa. Hace días circuló la información acerca de que llegarían más sanciones a Rusia en el caso de que invada Ucrania, y así fue.
Este 25 de febrero Biden autorizó fuertes sanciones adicionales y nuevas limitaciones sobre lo que se puede exportar a Rusia. Esto le traerá problemas en su economía, "Hemos diseñado a propósito estas sanciones para maximizar el impacto a largo plazo en Rusia y minimizar el impacto en EE.UU. y nuestros aliados." , dijo.
Fue luego de ese discurso de Biden que Rogozin afirmó en su cuenta de Twitter que la ISS podría salirse de la órbita y chocar contra la Tierra en algún lugar, debido a las sanciones de varias naciones contra Rusia, y esto podría tener serias consecuencias en el espacio.
Las palabras del representante ruso alarmaron a muchas naciones, no sólo porque no se sabe hasta que punto es capaz de avanzar con esta guerra el presidente Vladímir Putin, sino porque Rogozin dijo además que la ISS pesa 500 toneladas y mide 109 metros de largo por 43 de ancho, y remarcó que no sobrevuela a Rusia, por lo tanto no les preocuparía que cayera descontroladamente hacia la Tierra y los golpee.
Sin embargo, "insinuó" que sería un problema para EE.UU., parte de Europa, China, India, etc. “Así que todos los riesgos son tuyos. ¿Estás listo para ellos? ¿Quieres amenazarlos con tal perspectiva?”, respondiéndole a Biden. Sus declaraciones fueron realmente tan desafortunadas como escalofriantes.
¿Qué dice la NASA y la ESA?
Luego de las declaraciones de Biden y de la inquietante respuesta de Rogozin, la NASA sin embargo afirmó: “continuamos trabajando con Roscosmos y nuestros otros socios internacionales en Canadá, Europa y Japón para mantener operaciones seguras y continuas en la ISS”. “Las nuevas medidas de control de exportaciones seguirán permitiendo la cooperación espacial civil entre EEUU. y Rusia. No se planean cambios en el apoyo de la agencia para las operaciones en órbita y de la estación terrestre”, completa.
Por su parte, el director general de la ESA, Josef Aschbacher, escribió en su cuenta de Twitter que "la cooperación espacial sigue siendo un puente" entre los distintos países implicados. "La ESA continúa trabajando en todos sus programas, incluida la campaña de lanzamiento de la ISS y ExoMars, para cumplir los compromisos con los Estados miembros y los socios. Seguimos monitoreando la evolución de la situación".
En su cuenta de Twitter, Rogozin escribió recientemente: "nuestras preocupaciones han sido escuchadas, y la NASA confirmó su voluntad de seguir cooperando con Roscosmos. Mientras tanto, seguimos analizando las nuevas sanciones estadounidenses para detallar nuestra respuesta".
Recordemos que recientemente la NASA dio a conocer que en 9 años parte de la ISS terminará su vida útil y la estrellarán contra nuestro planeta pero de manera controlada, el impacto sería sobre el Océano Pacífico, en el lugar conocido popularmente como "Punto NEMO", que es el área deshabitada oceánica del Pacífico Sur.
La intención es que la ISS siga operando hasta fines del 2030 y termine estrellándose contra el mar en el punto del planeta que está más alejado de tierra firme, a más de 4800 km de la costa este de Nueva Zelanda y más de 3200 km al norte de la Antártida. Ese método no representa un peligro para el hombre y los ecosistemas.
Esperemos que el destino de la ISS este en fase y respete lo acordado según el programa espacial conjunto, y que ningún enfrentamiento bélico entre los hombres en la Tierra lleve a cambiar los planes con un desenlace que podría ser fatal.