¿Habrá más tornados y trombas marinas en un mundo más cálido? El caso del superyate "Bayesian" del magnate británico
Esta pregunta es recurrente cada vez que una irrupción de tornados mortíferos afecta a los EE.UU. continentales o a otras partes del mundo. Ahora se ha hecho viral tras el hundimiento del superyate de lujo con 22 personas a bordo, que se hundió en Porticello, Sicilia, por una posible tromba marina en un Mediterráneo muy cálido.
Los tornados son uno de los fenómenos más violentos de la naturaleza. Se forman dentro de algunas nubes de tormentas muy organizadas y adversas en forma de una columna de aire en rotación. Cuando estas columnas giratorias tocan tierra se les denomina tornados y cuando tocan una superficie acuática se les llama trombas marinas.
Los hay de muchos tipos, formas e intensidades, desde los más "débiles", que causan leves desperfectos en tierra, hasta los más intensos con vientos potencialmente mortíferos que pueden superar los 250-300 km/h y generar muerte y destrucción a su paso.
Para que se forme un tornado o tromba marina, se deben dar una serie de circunstancias muy especiales y a la vez, que a grandes rasgos son: la presencia de inestabilidad para generar fuertes corrientes ascendentes, cierto grado de humedad para el desarrollo de nubes convectivas y tormentosas, y un mecanismo de disparo que genera la potencial nube tornádica. Además, los vientos deben variar con la altura en capas bajas-medias, en intensidad y/o en dirección, la llamada cizalladura del viento, para organizar y mantener la columna de aire giratoria dentro de la nube.
Hoy por hoy, hay factores que, con el calentamiento del planeta se pueden ver favorecidos, como la inestabilidad y el aumento de la humedad, que podrían generar más tornados o trombas marinas sobre aguas más cálidas, pero otros factores como el mecanismo de disparo y la cizalladura no están muy claros en favorecer ciertas nubes tornádicas en un mundo más cálido. En otras palabras, hay ciertas incertidumbres sobre si habrá más o menos tornados o magas en un mundo más cálido, sobre todo en las mismas zonas que las que hay hoy en día.
El hundimiento del Bayesian en aguas muy cálidas frente a las costas de Sicilia
Las primeras hipótesis meteorológicas de trabajo son que una tromba marina muy intensa se desarrolló bajo una nube de tormenta muy organizada en las primeras horas del 19 de agosto de 2024 frente a las costas de Sicilia.
La tromba marina pudo golpear y hundir al superyate. Posiblemente, hubo otros factores no meteorológicos que realzaron el rápido hundimiento del barco, que nos serán tratados aquí.
Durante este verano Italia ha sufrido varias olas de calor y la temperatura de la superficie del agua del mar en Sicilia era, en el momento del hundimiento, de casi 30 °C, 3 ºC más alta que la media para esa época del año.
De hecho, hay olas de calor marinas actualmente en el Mediterráneo, que es una de las zonas más afectadas por el cambio climático antropogénico.
La gasolina de primera viene generada por el aumento de las temperaturas de la superficie del mar debido a los gases efecto invernadero, lo que significa más energía y humedad en el aire y, por lo tanto, en términos generales, más potencial de desarrollar tormentas más intensas.
Lo que sí es cierto, es que no es posible atribuir directamente al cambio climático un evento meteorológico como el que hundió al Bayesian a primeras horas del 19 de agosto de 2024. Pero sí es cierto que el calentamiento climático está detrás de un Mediterráneo cada vez más cálido.
¿Más tornados, trombas marinas y más muertos en un mundo más cálido?
Actualmente los modelos climáticos no tienen la suficiente resolución espacio-temporal para simular estructuras relativamente pequeñas como los tornados o trombas marinas, pero no solo eso, estos modelos actuales "no ven" las tormentas madres que generan a estos sistemas potencialmente mortíferos.
Lo que los modelos climáticos pueden prever las condiciones ambientales generales donde se desarrollan las nubes tornádicas, como el aire más cálido y más húmedo, vientos dominantes y generales cambiantes y los mecanismos de disparo (frente frío, vaguada, DANA, etc.). Los modelos climáticos están lejos de predecir las condiciones meteorológicas específicas locales para el desarrollo propio y específico de los tornados y de las trombas marinas.
La probabilidad de tornados en otoño e invierno aumentará, mientras que disminuirá en la temporada tradicional de primavera y verano.
Las tendencias espaciales indican que la mayoría de los tornados en Estados Unidos parece estar desplazándose hacia el este, lejos de las llanuras escasamente pobladas de, por ejemplo, Oklahoma, y hacia suburbios y ciudades más densamente habitados en Alabama.
Por otra parte, los sistemas de alerta temprana, SAT, están avisando y alertando mejor sobre los tornados y trombas marinas en amplias zonas de la Tierra, lo que ha hecho disminuir los impactos mortales en muchas zonas. Se espera que estos SAT mejoren el futuro con las nuevas técnicas y modelos de predicción, por lo que se podrán evitar y disminuir muchas muertes por estos fenómenos adversos en un mundo más cálido.