Villa Gesell: el incendio forestal que pudo ser tragedia
Momentos de mucha tensión se vivieron el martes en la tarde en Villa Gesell, cuando un incendio forestal creció rápidamente por las ráfagas de viento fuerte, y quemó varias hectáreas. Además las llamas se propagaron afectando viviendas y dejaron evacuados. Acá el reporte completo.
Era una tarde típica de verano y sol en Villa Gesell, localidad costera ubicada en el centro-este de la provincia de Buenos Aires, cuando pasadas las cuatro de la tarde del martes 28 de enero de 2020 los vecinos detectaron llamas. El humo había logrado expandirse rápidamente y se podía ver incluso desde la línea de la playa como una gran “nube negra”, que llamó la atención de todos y preocupó.
El incendio forestal había comenzado (por causas desconocidas hasta el momento de redactar esta nota), en la zona boscosa, casi sobre la ruta interbalnearia número 11 (km 407) en el Barrio Los Troncos, en el ingreso norte a la ciudad de Gesell. Rápidamente los secos pastizales y árboles ardieron.
La situación meteorológica en ese momento favorecía la propagación de las llamas, el termómetro marcaba los 28°C, el ambiente era cálido y relativamente seco (40%), pero el principal enemigo era el viento sostenido de 20km/h y ráfagas que por momentos tocaban los 50km/h. La dirección del viento fue la más importante, soplaba desde el norte, lo que hacía que las llamas se inclinen y propaguen hacia el sur, justamente hacia donde se encontraba la zona urbanizada. Tal es así que lamentablemente el fuego afectó viviendas.
El combate del fuego
En primer lugar se destaca la labor de los vecinos, ellos fueron los que primero advirtieron las llamas, movilizados por la solidaridad comenzaron a apagarlas de manera precaria y casera (con lo que tenían a mano). Sin barbijos ni protección de ningún tipo, con baldes de agua que traían cargados desde una piscina cercana y removiendo arena con palas.
Un trabajo extremadamente peligroso, un acto heroico, desesperado e impulsivo, ellos sólo querían detener el avance del fuego sobre sus hogares, pero no se percataron de que estaban en una situación de mucho riesgo. De no ser porque la situación meteorológica no era demasiado extrema, esta acción de ayuda (sin medir consecuencias) se podría haber cobrado víctimas fatales. Por fortuna no se lamentaron muertos, ni heridos, las maniobras de los civiles fueron de gran ayuda para sofocar el incendio.
Unas 22 dotaciones de bomberos voluntarios trabajaron en la zona: la mayoría del cuartel central de bomberos voluntarios de Villa Gesell, el aeropuerto, también de Cariló, Pinamar, Madariaga y Costa del Este. Dos aviones y un helicóptero de Manejo Nacional del Fuego, se sumaron a las tareas para contener las llamas, con el apoyo de maquinaria pesada del municipio, en colaboración además con la policía, defensa civil, y personal de seguridad comunal.
Luego de casi tres horas de trabajo incesante, cerca de las 19 horas, el fuego estaba en parte controlado dejando a salvo la zona habitada. Durante toda la noche se desplegó una guardia de cenizas, monitoreando la región para evitar que algún foco o punto caliente se reactive, dado que el pronóstico de rotación del viento con ráfagas fuertes desde el sur estaba previsto.
Los afectados
El incendio que comenzó en los pastizales alcanzó una zona urbanizada, afectó directamente a cuatro casas (tres de manera parcial y una de manera total). Los habitantes corrieron para intentar salvar del fuego algunas de sus pertenencias, y por el peligro presente hubo familias evacuadas y autoevacuadas.
El aire cerca de las 17 horas se tornaba irrespirable, con ráfagas que arrastraban el hollín y complicaban (por las partículas en suspensión) tanto ver como respirar. Se estimaron en un principio 50 hectáreas quemadas, luego de un sobrevuelo por la zona el número se ajustó a unas 20 ó 30 hectáreas de bosque nativo afectado.
Pronóstico para la zona
Durante la madrugada de miércoles se espera que avance un frente frío sobre la provincia de Buenos Aires, barriendo de sur a norte la región. Para la zona de Gesell se dará una rotación de viento desde el sur con ráfagas y descenso de temperatura. Es posible actividad eléctrica pero viene acompañada de agua. Se esperan lluvias y tormentas con mejoras temporarias, hasta el mediodía de miércoles al menos. En este caso la meteorología juega a favor, para que los puntos monitoreados queden totalmente desactivados y fuera de peligro.