Volcán de lodo: emergencia por sorpresivas erupciones

Durante la noche del pasado sábado 29 de mayo, comenzaron a llegar varios llamados telefónicos de alerta al Consejo Municipal de Gestión de Riego perteneciente a Necoclí, departamento de Antioquia, Colombia. Los habitantes de esta comunidad les informaron a sus autoridades, con gran preocupación y urgencia, que una serie de explosiones sorpresivas de gases, lodo hirviente y cenizas, emanaban violentamente de un cráter, este hecho causó al menos un herido.

Ante la emergencia, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios y personal de Defensa Civil se presentaron en la zona, tras la decisión de los directivos de la corporación ambiental y las alcaldías locales, se procedió a la evacuación preventiva de 26 familias, que debieron abandonaron sus hogares frente a esta inesperada situación.

Fue necesario el traslado inmediato de al menos unas 150 personas desde la zona de Palmares de Ceniza, cercana al volcán de lodo, hacia un colegio rural en Piedrecita donde les brindaron toda la atención necesaria y ayuda humanitaria. El albergue se habilitó luego de que se realizara un consejo de gestión del riesgo de emergencia; además, las autoridades aclararon que se pedirá una evaluación del Departamento de Gestión del Riesgo de Antioquia (Dagran).

La Alcaldía de Necoclí espera que Dagran envíe a un experto geólogo, para determinar si es seguro, o no, que las familias evacuadas de manera preventiva regresen a sus hogares. Desde la entidad explican, que serán necesarios algunos estudios geológicos específicos sobre el territorio, porque este no es el único volcán de la zona.

Se activa el monitoreo

Este tipo de explosiones de lodo hirviente pueden generar una expulsión violenta de bloques, causar incendios o deslizamientos, producto de la actividad sísmica local registrada durante el evento. Teniendo en cuenta esta información, las autoridades recomendaron a los habitantes de siete municipios que residen cerca de estos volcanes de lodo, a restringir la presencia de personas en un radio de 250 a 400 metros alrededor de los centros de estos cráteres, tanto activos como inactivos. Mientras tanto continúan con el monitoreo, para evitar que frente a una nueva posible erupción repentina se pongan en riesgo a más personas, las labores se iniciaron en los volcanes que han registrado actividad en las últimas tres décadas.

Se activó entonces el monitoreo de volcanes de lodo en Cartagena, los trabajos del equipo de Conocimiento del Riesgo y la Universidad homónima, realizarán la tarea de manera aérea con un dron, mientras que otro grupo tratará de acercarse por tierra, pese a las condiciones de difícil acceso.

Dada la intensa actividad en Necoclí, se iniciaron trabajos de prevención sumamente necesarios evaluando el estado de 13 puntos de actividad diapírica en la jurisdicción de Cartagena, y aquellos cercanos como: El Rodeo y Membrillal en Bayunca, Yerbabuena en Pontezuela y el punto del volcán submarino cercano a la costa de Punta Canoa, explican los funcionarios a medios locales.

Los volcanes de Pontezuela 2, La Guayacana en Punta Canoa, Barú, y una serie de volcanes ubicados entre Bayunca y Arroyo de Piedra, conocidos como: Arroyo Carabajal, Don Juan, Loma Grande, Guayabita y Juan II, también estarán bajo inspección. Esto le servirá a los geólogos para actualizar los datos, y con esa información recolectada actualizar los mapa de riesgos del distrito, y la estrategia de respuesta a emergencias actuales.

En realidad no son “volcanes”

Estos “volcanes de lodo” en realidad son formaciones en el relieve con un cono de poca altura y un cráter, pero su origen no está relacionado con las formaciones volcánicas (salvo contadas excepciones). Se trata de emanaciones de gases (como metano, en ocasiones dióxido de carbono y nitrógeno), con mezcla de sólidos finos suspendidos en hidrocarburos líquidos, y otros líquidos que pueden incluir agua. Estas formaciones geológicas están relacionados mayormente con los yacimientos petroleros.

Se trata de respiraderos que tienen erupciones de lodo, sedimentos, vapores, piedras, agua hirviente, pero no lava, y son expulsados desde depósitos profundos hacia el exterior. Estas aberturas en la superficie, generalmente poseen temperaturas mucho más frías que las de los procesos volcánicos, y sus estructuras más grandes pueden alcanzar unos 10 km de diámetro y llegar a 700 metros de altura.

No tan populares, pero hay muchos

Los “volcanes” de lodo son propios de la zona de subducción en la región Caribe colombiana, por ejemplo, que se extiende desde el Urabá antioqueño hasta la península de La Guajira, por lo que las manifestaciones de volcanismo de lodo se presentan en una franja de rocas llamada Cinturón del Sinú, la cual se extiende desde el Golfo de Urabá hasta la región de Barranquilla, incluyendo áreas terrestres y marinas, según aseguran los especialistas.

Pero no es la única zona en el mundo que presenta estas formaciones, como dijimos, estos “volcanes” se producen en muchas regiones del planeta y son más frecuentes en países donde también hay depósitos de petróleo y gas cerca de fallas tectónicas, como Colombia, Venezuela, Trinidad, Yellowstone, China, Pakistán, y países del sudeste asiático, entre otros.