Alimentos vs clima: su desayuno podría contribuir al cambio climático
Muchos de nosotros sabemos que una dieta a base de carne es mala para el medio ambiente, pero ¿sabías que tu café y pasteles matutinos también podrían tener un efecto perjudicial sobre el clima?
Una dieta poco saludable no solo es mala para ti, es mala para el planeta, dice una nueva investigación que reveló que casi una cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con la dieta se pueden atribuir a alimentos y bebidas menos nutritivos.
Se ha informado ampliamente que las dietas a base de carne son malas para el medio ambiente, ya que las dietas no vegetarianas producen un 59% más de emisiones de gases de efecto invernadero que las vegetarianas. Sin embargo, la carne no es la única culpable; una investigación de la Universidad de Leeds encontró que los dulces, pasteles y galletitas representan el 8,5% de los gases de efecto invernadero relacionados con los alimentos, mientras que las bebidas como el té, el café y el alcohol contribuyen con un 15,1% adicional.
Curiosamente, los hábitos de alimentación y bebida de los hombres aportan un 41% más de gases de efecto invernadero que los de las mujeres.
Cambia tu dieta, salva el planeta
La investigación estudió más de 3,000 alimentos genéricos y 40,000 de marca para proporcionar una imagen detallada de cómo la dieta de una persona impacta el clima. Se basa en investigaciones anteriores que identificaron alimentos con un alto impacto ambiental utilizando grupos de alimentos muy amplios y los vinculó con estimaciones simples de emisiones de gases de efecto invernadero.
Si bien es útil para sugerir acciones a nivel nacional o poblacional, esta investigación solo ofreció una guía limitada para las personas que esperaban limitar el impacto climático de su estilo de vida, a diferencia de esta nueva investigación que ofrece información sobre tales cambios, con la ventaja adicional de mejorar la ingesta nutricional.
“Todos queremos aportar nuestro granito de arena para ayudar a salvar el planeta y las decisiones que tomemos pueden contribuir a esa causa”, comenta la Dra. Holly Rippin, investigadora postdoctoral de la Facultad de Medicina de Leeds. "Es cierto que necesitamos grandes cambios culturales, como reducir significativamente nuestro consumo de carne y productos lácteos, que juntos contribuyen alrededor del 46% de nuestras emisiones relacionadas con la dieta".
“Sin embargo, nuestro trabajo muestra que los pequeños cambios también pueden producir grandes beneficios. Puedes vivir una vida más sostenible desde el punto de vista medioambiental simplemente eliminando los dulces y bebiendo menos café ”, añadió Rippin, autor principal del estudio publicado en PLOS ONE.
El equipo llegó a la conclusión de que una dieta saludable basada en alimentos no procesados, en gran parte a base a vegetales, es sostenible. Esto reafirma el informe sobre el cambio climático del IPCC de 2019, que sugiere que cambiar a una dieta de este tipo podría reducir las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con la dieta en un 80% y prevenir una quinta parte de las muertes prematuras de adultos.
“Este estudio detallado confirma que las dietas que son mejores para la salud del planeta también son mejores para nuestra propia salud personal”, dice la profesora Janet Cade de la Facultad de Ciencias de la Alimentación y Nutrición de la Universidad.