Cucarachas: cinco remedios caseros infalibles para mantenerlas alejadas
Algunos ingredientes naturales sirven para mantener lejos a las cucarachas, sin recurrir a químicos agresivos.
Pocos bichos más indeseables y con peor reputación que las cucarachas. Intrusas sigilosas de la noche, su repentina aparición sobre pisos y mesadas asusta hasta al más valiente.
Las cucarachas han sobrevivido por miles de años gracias a su capacidad de adaptación. Su exoesqueleto les brinda enorme resistencia a cambios ambientales y a la deshidratación, y pueden sobrevivir sin comida por semanas.
Tienen un sistema reproductivo muy eficiente: se multiplican en poco tiempo y en grandes cantidades, lo que les permite colonizar áreas rápidamente.
Las cucarachas pueden representar varios riesgos para la salud. Dado que habitan y circulan por lugares sucios, como cañerías y basura, son portadoras de bacterias y gérmenes que pueden contaminar alimentos y superficies. Esto puede causar enfermedades gastrointestinales. Además, sus excrementos y saliva pueden desencadenar alergias y asma, especialmente en personas sensibles.
Las soluciones que recomiendan las abuelas
Además de los métodos clásicos, como insecticidas, cebos o el violento pisotón, hay algunas recetas simples, económicas y hasta pacíficas para mantenerlas lejos del hogar.
Una de ellas es el laurel. Su intenso aroma resulta desagradable para las cucarachas. Algunas formas de aplicarlo son las siguientes.
Polvillo: triturar entre 150 y 200 gramos de hojas secas hasta obtener un polvo, que se puede esparcir en rincones y grietas de la casa, especialmente en áreas donde los insectos suelen esconderse.
Sachets: armar bolsitas de tela con hojas de laurel secas. Colocar estas bolsitas en armarios, cajones y alacenas ayuda a mantener a las cucarachas alejadas de los lugares donde podrían buscar refugio. Para asegurar su eficacia, es recomendable cambiar las hojas cada dos semanas.
Infusión de laurel: hervir algunas hojas y, una vez que el líquido se enfría, rociar el líquido en las áreas clave.
Romero
Resulta que esta hierba aromática, tan sabrosa en salsas y carnes, a las cucarachas les resulta muy desagradable. Por eso, aplicar romero en lugares estratégicos, como desagües, rincones, y rendijas, resulta un buen truco para mantenerlas a raya. Estas son algunas maneras de prepararlo.
Aceite esencial de romero: mezclar unas gotas de aceite esencial de romero con agua en un spray y rociar en las superficies donde circulan. El olor fuerte actúa como un disuasivo.
Infusión de romero: hervir ramitas de romero en agua y deja enfriar. Aplicar la infusión en un spray en las áreas problemáticas.
Ramitas secas: colocar ramitas secas en rincones, armarios o lugares donde suelen aparecer cucarachas.
Sachets: llenar bolsitas de tela con romero seco y colocarlas en rincones, alacenas, y cerca de los desagües para crear una barrera de olor.
Además de su función como repelente, el romero también ayuda a limpiar el ambiente, por su aroma y sus propiedades antibacterianas.
Otros aliados para repeler cucarachas: pepino, vinagre y café
El pepino fresco también funciona como repelente contra las cucarachas. Se cree que el olor les resulta desagradable, por lo que tienden a evitar áreas donde se encuentre.
Se pueden colocar rodajas o cáscaras de pepino en los lugares por donde puede ser que circulen. También se pueden armar saquitos de pepino. Para eso, hay que secar algunas rodajas y colocarlas en sobres de tela.
El café también puede ser un aliado contra las cucarachas. Se puede esparcir la borra de café húmeda en las áreas donde frecuentan los insectos. También se puede mezclar café y agua, y rociar los rincones oscuros y húmedos. Este método no sólo es ecológico, sino que también aprovecha un recurso que normalmente se desecha.
Por su olor y acidez, el vinagre es otro recurso eficaz para espantar cucarachas. Hay que mezclar partes iguales de vinagre y agua en un pulverizador, y rociar las áreas críticas. Este método no solo ayuda a ahuyentar a las cucarachas, sino que, además, limpia y desinfecta superficies.
El vinagre puede eliminar la suciedad que atrae a los insectos, por lo que es una opción natural y económica para mantenerlos lejos.
Estos métodos no garantizan que desaparezcan totalmente, pero pueden complementar otras estrategias de control y ser una opción más natural para quienes prefieren evitar químicos agresivos en sus hogares.
Las cucarachas se alimentan de restos de comida y desechos de tocador que ni siquiera imaginamos. Por eso, lo más importante es mantener siempre la limpieza en toda la casa, especialmente en cocinas y baños.