Del 0 al 52, ¿qué tan azul está el cielo hoy?
Aunque muchos no lo conocen, existe un instrumento meteorológico llamado cianómetro que sirve para identificar el tipo de celeste en el cielo. Según este artefacto, puede haber hasta 53 tonos diferentes de azules.
Un cianómetro es un instrumento creado alrededor del año 1790 por el padre del alpinismo, Horace Bénédict de Saussure, que se utilizaba para medir la intensidad del color del cielo azul. El dispositivo consiste en el despliegue de cuadrados de papel teñidos en tonos graduados de azul y dispuestos en un círculo de color que puede sostenerse para compararlo con el color del cielo.
En total, Saussure tiñó 53 tiras de papel. El círculo comienza con el color blanco, al que le corresponde el número 0, y finaliza con el color negro, al que se le atribuye el 52. Los otros 51 trozos de papel están coloreados con celestes y azules cada vez más profundos.
La idea de registrar las tonalidades del firmamento se le ocurrió en una de sus travesías escalando el Mont Blanc. Él, así como otros escaladores de montañas, habían notado que a medida que subían más alto, el cielo se volvía de un azul más oscuro. Incluso existía una leyenda en los Alpes que decía que si se subía lo suficiente en la atmósfera, el cielo se volvía completamente negro, lo que haría caerse al vacío a quien osara adentrarse en aquellos dominios. Estos miedos hicieron que durante mucho tiempo nadie se animara a subir más de la cuenta por las montañas.
Saussure no solo logró demostrar que era cierto que el cielo se oscurecía a medida que se ascendía. También estaba convencido de que el color del cielo era un efecto óptico y sostuvo que, ya que el azul se desvanecía sutilmente en el blanco de las nubes, el color debía de ser un indicador del contenido de humedad del aire. Así que el escalador también construyó un artefacto que era un indicador del contenido de vapor de agua que había en la atmósfera.
Saussure utilizó su cianómetro durante el resto de su vida y, según se sabe, el azul más profundo que registró fue uno avistado desde la cima del Montblanc, que medía 39 grados de azul en la escala del precioso aparato. Años más tarde, Alexander von Humboldt, otro asiduo usuario del cianómetro, registró un cielo de 46 grados de azul, desde la cima del volcán Chimborazo, en los Andes.
Pero las muchas mediciones realizadas con su herramienta arrojaron poca información, y el cianómetro cayó en desgracia como herramienta científica. Cuando la verdadera causa del azul del cielo, la dispersión de la luz, se descubrió décadas más tarde, en la década de 1860, el círculo azul de Saussure ya había caído en la oscuridad.
Y vos, ¿qué azul estás viendo hoy?