El Amazonas en la trampa del fuego: la deforestación y el calentamiento convierten la selva en pastizales
El Amazonas sigue siendo deforestado. El ecosistema sigue sufriendo daños masivos y las consecuencias son devastadoras.
La región amazónica se enfrenta a un reto crítico, puesto de relieve por un nuevo estudio publicado en Nature Communications Earth and Environment.
Esta investigación destaca el papel potencial del fuego como impulsor de cambios drásticos en el ecosistema amazónico. El estudio advierte de que la combinación del cambio climático global y la deforestación masiva podría aumentar el riesgo de un cambio irreversible de la selva amazónica a un estado herbáceo o incluso sin árboles.
La investigación subraya la posibilidad de que el fuego lleve a la selva amazónica a una especie de punto de inflexión. Hasta ahora, el fuego no ha desempeñado un papel significativo en las condiciones de humedad de la selva.
Pero una vez que el bosque sufra daños, se reduzca o incluso se pierda, el fuego podría convertirse en un elemento dominante. El estudio subraya que podría ser el fuego el que encerrara a la selva en un estado desarbolado, dejando grandes partes del Amazonas incapaces de volver a crecer tras su destrucción. Dependiendo de la intensidad del cambio climático, entre el 56% y el 86% del bosque podría perderse irremediablemente.
Amazonas: el importante elemento de inflexión
Los árboles amazónicos desempeñan un papel crucial en el ciclo del agua. Transportan grandes cantidades de agua del suelo a la atmósfera. A continuación, esta agua se condensa en forma de lluvia y vuelve a nutrir el bosque. Este proceso crea una especie de ríos caudalosos que no sólo estabilizan el Amazonas en su conjunto, sino que le permiten desplazarse hacia regiones más secas.
Este frágil equilibrio de reciclaje de la humedad es la razón por la que el Amazonas se considera un "punto de inflexión" del ecosistema mundial. Pero el cambio climático y la deforestación podrían alterar este proceso y provocar una espiral de pérdida de bosques que se reforzaría a sí misma.
Los resultados del estudio dejan claro que el fuego desempeña un papel clave en la irreversibilidad de los cambios. Las simulaciones muestran que el bosque podría recuperarse en un periodo de hasta 250 años sin la presencia del fuego. Sin embargo, incluir el fuego en la ecuación podría obstaculizar este proceso y provocar la pérdida permanente de bosques.
El estudio subraya que la protección contra los incendios forestales es importante no sólo para evitar daños agudos, sino también para mantener el frágil equilibrio del ecosistema amazónico.
El Amazonas necesita urgentemente una protección especial
Otro aspecto importante del estudio es la constatación de que las interacciones entre el fuego, la selva tropical y el clima son complejas. Éstas se investigaron con ayuda de un completo modelo del sistema terrestre. Los investigadores pudieron demostrar cómo interactúan estos factores y con qué sensibilidad reacciona el equilibrio del ecosistema ante los cambios.
La coautora del estudio, Kirsten Thonicke, subraya que es crucial respetar los límites del ecosistema global y frenar tanto el cambio climático como la deforestación. Así se podrían evitar cambios irreversibles provocados por el fuego.
Muestra cómo las complejas interacciones del ecosistema pueden llevar a la selva a un punto en el que no pueda recuperarse. La selva amazónica no sólo es fundamental para la biodiversidad y la población locales, sino también para el clima mundial y la estabilidad de todo el ecosistema. Es nuestra responsabilidad tomar medidas para preservar esta región única antes de que sea demasiado tarde.