¿Estamos solos en el universo? Un estudio de Science muestra que esta posibilidad es mucho menor de lo que se pensaba
Hasta ahora siempre se ha pensado que el nacimiento y la evolución de la vida en nuestro planeta fue el resultado de una serie de acontecimientos fortuitos, según un nuevo estudio esto no es así y probablemente no seamos los únicos.

Un grupo de investigadores de Penn State, la universidad estatal de Pensilvania, en Estados Unidos, ha realizado un estudio decididamente innovador que aporta una nueva interpretación sobre el origen de la civilización humana.
Las implicaciones de este estudio son de gran alcance y aumentan la probabilidad de que existan formas de vida inteligente en algún lugar del universo.
Hasta ahora, de hecho, siempre se ha creído que el desarrollo de la vida en la Tierra fue un acontecimiento extraordinario e improbable debido a una serie de acontecimientos fortuitos que ocurrieron en nuestro planeta y que, por tanto, eran difíciles de replicar en otros.
No más modelos de “pasos difíciles”
Sin embargo, según este estudio, la evolución de la civilización terrestre podría no haber sido tan difícil e improbable.
La teoría de que el desarrollo de vida inteligente en nuestro planeta fue pura casualidad fue desarrollada en 1983 por el físico teórico australiano Brandon Carter, quien formuló el llamado “modelo de los pasos difíciles”.
Según Carter, de hecho, el desarrollo de formas de vida complejas requiere superar una serie de pasos difíciles, cada uno de los cuales es un cuello de botella evolutivo y sólo su finalización secuencial conduce al desarrollo de vida inteligente.
Obviamente, cuanto más pasos haya que completar, más tiempo se requiere para superarlos y esto hace altamente improbable el origen evolutivo de la humanidad debido al tiempo requerido para su evolución en comparación con la vida total de nuestra estrella , el Sol.
Entonces como el nacimiento de la humanidad es improbable, en consecuencia la probabilidad de que exista otra civilización desarrollada aparte de la nuestra es aún menor.

Sin embargo, según el modelo desarrollado por Daniel Mills (primer autor de este estudio) y sus colegas, la evolución de la vida compleja puede depender menos del azar y más de la interacción entre la vida y su entorno.
Los investigadores creen que el entorno de la Tierra inicialmente no era hospitalario para diversas formas de vida y que algunos pasos evolutivos sólo fueron posibles cuando el entorno global alcanzó un estado "permisivo".
Esto significa que los humanos evolucionaron cuando las condiciones fueron favorables y no por una serie de golpes de suerte, por lo que puede ser sólo cuestión de tiempo antes de que otros planetas alcancen estas condiciones favorables. Obviamente no todos los planetas alcanzan este estado óptimo para el desarrollo de la vida al mismo tiempo; habrá planetas más rápidos y más lentos.
El nuevo modelo plantea la hipótesis de que el momento de la aparición de la humanidad en la Tierra está vinculado a la apertura secuencial de las llamadas “ventanas de habitabilidad” a lo largo de la historia de nuestro planeta. Estas ventanas se abrieron tras los cambios en la disponibilidad de nutrientes, las temperaturas del mar, los niveles de salinidad del océano y la cantidad de oxígeno en la atmósfera.
Obviamente, dada la complejidad de estos factores interconectados, la Tierra sólo recientemente se volvió hospitalaria para la civilización humana, pero este momento puede no ser el mismo en otros planetas.
Una perspectiva innovadora
Una de las principales diferencias entre esta teoría y la teoría de los pasos difíciles es el cambio de perspectiva: las predicciones ya no se basan en la duración de la vida del Sol como hizo Carter, sino que se utiliza una escala de tiempo geológico, específica de la Tierra.
El campo de desarrollo del modelo innovador ya no es la astrofísica pura, sino que ve la mezcla de varios campos como la física, la biología y la geología. Esto proporciona una imagen más matizada de la evolución de la vida en un planeta como el nuestro y abre el camino para nuevas investigaciones destinadas a responder a la pregunta de la posibilidad de la existencia de otras formas de vida inteligente en el universo.
Evidentemente, el estudio debe profundizarse con análisis tanto en nuestro propio planeta, investigando el origen de la vida en la Tierra, la fotosíntesis oxigénica, la multicelularidad animal y, por supuesto, la aparición del Homo Sapiens; pero también buscando en las atmósferas de posibles exoplanetas la presencia de oxígeno y posibles bioseñales.
Referencia de la noticia:
Daniel B. Mills et al., A reassessment of the “hard-steps” model for the evolution of intelligent life.Sci. Adv.11,eads5698(2025).DOI:10.1126/sciadv.ads5698