Un experimento sugiere que la piel mojada puede atenuar el impacto de un rayo
Investigadores alemanes revelan cómo la lluvia podría reducir la mortalidad de las descargas eléctricas de los rayos.
Si tenemos la mala suerte (o la imprudencia) de quedarnos a la intemperie durante una tormenta, corremos el riesgo de ser alcanzados por un rayo. Si además nos moja la lluvia, pensaríamos que una descarga sobre nuestro cuerpo mojado sería fatal. Porque - ya lo sabemos- la combinación agua + electricidad casi nunca es buena.
Sin embargo, según un nuevo estudio, esto no sería necesariamente así. Investigadores de la Universidad Tecnológica de Ilmenau en Alemania, reprodujeron la caída de rayos sobre simulaciones de cabezas humanas.
Descubrieron que las cabezas, cuando estaban mojadas, sufrían menos daños que las cabezas secas.
Sorprendente ¿no? Estudios previos sobre animales habían demostrado que aquellos que recibían descargas estando mojados sufrirían menos daños que los animales secos. Pero el por qué sucede esto y si ocurre lo mismo en los humanos eran cuestiones aún por explorar.
Así que los científicos alemanes se preguntaron: ¿podría la lluvia sobre la piel aumentar la supervivencia si nos cae un rayo?
Si llueve, mejor
Para eso, un equipo liderado por René Machts desarrolló modelos de cabezas humanas, con capas similares al cuero cabelludo, al cráneo y al cerebro. Utilizaron una sustancia similar al agar, que contiene cloruro de sodio y grafito para reproducir las propiedades conductoras de una cabeza humana.
El experimento demostró que la corriente viajó a través del cuero cabelludo en ambas cabezas. Sin embargo, la cabeza mojada tenía una corriente eléctrica un 12,5 % menor en la capa del cerebro, y una energía un 32,5 % menor respecto de la cabeza seca. En general, la cabeza mojada tuvo menos daños.
Según los investigadores, esto podría explicar la tasa de supervivencia de los animales mojados en experimentos anteriores. Aunque, aclararon, es necesario seguir investigando.
El trabajo concluye que la lluvia en el cuero cabelludo contribuye potencialmente a una tasa de supervivencia del 70 al 90 %. “Si estás al aire libre y no hay refugio, la piel húmeda es mejor que la piel seca porque la película de agua es como una 'capa protectora'", explicó Machts.
“Con base en estos resultados, planeamos crear más modelos de cabezas para cuantificar el efecto de, por ejemplo, el casco y podemos investigar el material para un casco óptimo para reducir aún más la corriente en la cabeza. Sin duda, esto podría ayudar a los excursionistas que no pueden encontrar refugio”, dijo Machts.
Pero, recordemos lo más importante: si nos encontramos cerca de una tormenta, hay que buscar refugio. Bajo techo, dentro de un auto con las ventanillas altas, o si estamos a la intemperie, ponernos en cuclillas con la cabeza entre las piernas.
Referencia de la noticia:
Machts, R., Hunold, A., Drebenstedt, C. et al. La lluvia puede mejorar la supervivencia tras la caída directa de un rayo en la cabeza humana. (2024).