La IA descubre una fórmula para predecir monstruosas "olas rebeldes"
Las olas rebeldes, antes consideradas un mito por los marineros, cuentan ahora con una fórmula que permite predecir su aparición, gracias a una nueva investigación realizada con IA.
El poder indomable del océano abierto quizás se refleje mejor en el poder feroz de las olas rebeldes.
Notoriamente impredecibles, estas monstruosas características del mar alguna vez fueron descartadas como meras exageraciones difundidas por marineros con historias demasiado embellecidas. Pero todo eso cambió en 1995, cuando una ola de 26 metros de altura sacudió los cimientos de la plataforma de gas Draupner, situada a unas 100 millas de la costa noruega.
Los sensores a bordo confirmaron que midió más del doble del tamaño de las olas circundantes y la ola Draupner pasó a la historia como la primera ola rebelde registrada.
Desde entonces, los científicos se han esforzado por comprender estas anomalías marinas, y una nueva investigación ha dado un paso de gigante en este sentido, con un poco de ayuda de la inteligencia artificial.
Surfeando la ola de la IA
Con el objetivo de aprender más sobre la frecuencia de las ondas rebeldes, científicos de la Universidad de Copenhague y la Universidad de Victoria en Canadá, compilaron el equivalente a 700 años de datos sobre ondas, que abarcan más de mil millones de ondas individuales de todo el mundo.
Al reunir esta masa de datos en un algoritmo, con la ayuda del aprendizaje automático, pudieron condensarlos en una ecuación que describe la receta para una ola rebelde y la probabilidad de que ocurra.
"Nuestro análisis demuestra que se producen ondas anormales todo el tiempo", afirmó Johannes Gemmrich, coautor del estudio e investigador de la Universidad de Victoria. "De hecho, registramos 100.000 olas en nuestro conjunto de datos que pueden definirse como olas rebeldes. Esto equivale [a] alrededor de una ola monstruosa que ocurre cada día en cualquier lugar aleatorio del océano".
Gemmrich señala que no todas estas ondas rebeldes alcanzan tamaños extremos, ya que lo que importa es la diferencia de tamaño entre la onda rebelde y las ondas circundantes. Para ser definida como tal, una ola rebelde debe tener al menos el doble de altura que sus vecinas.
¿Qué causa las olas rebeldes?
Publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, el estudio también ha resuelto el antiguo enigma de las causas de las ondas rebeldes.
Hasta ahora, la teoría más común era que una onda rebelde se formaba cuando una onda se combinaba brevemente con otra, robando efectivamente su energía. Sin embargo, los investigadores descubrieron que el factor más dominante que impulsaba las olas anormales era un fenómeno conocido como superposición lineal, donde dos sistemas de ondas se cruzan y se refuerzan mutuamente durante un corto tiempo.
"Básicamente, es muy mala suerte cuando golpea una de estas olas gigantes", afirma Dion Häfner, autor principal del estudio y antiguo estudiante de doctorado en la Universidad de Copenhague. "Están causadas por una combinación de muchos factores que, hasta ahora, no se habían combinado en una única estimación del riesgo".
Los hallazgos del estudio son buenas noticias para el transporte marítimo y otras actividades marinas o costeras que dependen del mantenimiento de infraestructuras que pueden resultar dañadas por grandes olas.
El algoritmo desarrollado en el estudio se puso a disposición del público y los investigadores dicen que las compañías navieras pueden utilizarlo para obtener una evaluación de riesgos sobre si existe la posibilidad de encontrar olas rebeldes en un viaje determinado.