Los gases de efecto invernadero se escapan del permafrost del hemisferio norte debido al calentamiento del Ártico
Un nuevo estudio detalla dónde y cómo se escapan los gases de efecto invernadero de la vasta región de permafrost del hemisferio norte a medida que se calienta el Ártico.
El permafrost en el hemisferio norte es un tipo de suelo de la corteza terrestre que se encuentra permanentemente congelado, y está compuesto por rocas, turba, tierra y hielo. La mayoría se concentra en la región ártica, especialmente en partes de Rusia, Estados Unidos, Canadá y Dinamarca.
Los estudios ya han demostrado que esta región se está calentando entre 2 y 4 veces más rápido que el promedio global del planeta, y esto es preocupante, ya que el permafrost contiene grandes cantidades de carbono, más del doble del carbono presente en la atmósfera, y su derretimiento provoca la liberación de este gas de efecto invernadero a la atmósfera.
Ahora, un nuevo estudio que es parte del Global Carbon Project y en el que participan científicos de la NASA, ha detallado dónde y cómo se escapan los gases de efecto invernadero del permafrost del hemisferio norte a medida que las temperaturas en la región continúan aumentando.
El carbono en el permafrost del norte está en movimiento
El estudio, dirigido por investigadores de la Universidad de Estocolmo, dio a conocer el primer balance completo de gases de efecto invernadero (dióxido de carbono, metano y óxido nitroso) para el periodo 2000-2020, contabilizando fuentes y sumideros en el permafrost del hemisferio norte.
Los investigadores descubrieron que el permafrost en este período era un sumidero de dióxido de carbono (CO₂) de tamaño pequeño a mediano, que almacenaba entre 29 y 500 millones de toneladas de carbono por año.
“Sabemos que la región de permafrost ha capturado y almacenado carbono durante decenas de miles de años. Pero lo que estamos descubriendo ahora es que los cambios impulsados por el clima están inclinando la balanza hacia que el permafrost sea una fuente neta de emisiones de gases de efecto invernadero". - Abhishek Chatterjee, del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL)
Además, la región, especialmente los bosques boreales, absorbió más CO₂ del que liberó; y esta absorción fue compensada en gran medida por el CO₂ emitido por lagos y ríos, así como por los incendios que quemaron bosques y tundra.
La región también era una fuente de metano (CH₄) y óxido nitroso (N2O), el segundo y tercer gas de efecto invernadero más importantes, respectivamente, después del CO₂. Los humedales fueron la mayor fuente de CH₄ ; y las mayores fuentes de N2O, aunque relativamente pequeñas por unidad de superficie, procedían de la tundra seca y los bosques boreales.
En conclusión: la región de permafrost terrestre del hemisferio norte fue un pobre sumidero anual de CO₂ y una fuente estable de CH₄ y N2O durante el período 2000-2020. En otras palabras, la región oscila entre una fuente de carbono y un sumidero débil.
¿Y cuál es la preocupación?
El problema es que con el calentamiento del planeta y de la región, los suelos se están calentando, se está produciendo un deshielo y el carbono que antes estaba permanentemente congelado ahora también se está descongelando. Esto se debe a que los microbios presentes en este suelo descongelado descomponen las plantas muertas y otra materia orgánica, liberando CO₂ y CH₄, dos poderosos gases de efecto invernadero.
Y según los investigadores, la única forma de mantener el carbono del permafrost en el suelo es poner fin de inmediato a las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de las actividades humanas.
Referencia de la noticia:
Hugelius, G. et al. Permafrost Region Greenhouse Gas Budgets Suggest a Weak CO2 Sink and CH4 and N2O Sources, But Magnitudes Differ Between Top-Down and Bottom-Up Methods. Global Biogeochemical Cycles, v. 38, n. 10, 2024.