Un fósil olvidado en un museo confirma el extenso reinado del “ave del terror” en Sudamérica
Durante dos décadas, el fósil de un ave carnívora gigante descansó sin etiquetas y sin ser identificado en el Museo La Tormenta en Colombia, a la vista de todos y pasando desapercibido por los paleontólogos.
Hace casi 20 años, el coleccionista César Perdomo exploraba el árido desierto de Tatacoa, en el norte de Colombia, cuando desenterró un hueso monumental que no se parecía a nada que hubiera visto antes. Sospechando que pertenecía a una criatura extinta, el fósil, sin etiqueta, terminó en su colección en el museo La Tormenta en Huila, donde permaneció oculto a la ciencia durante décadas.
Sin embargo, en 2023, el especialista en aves, Federico J. Degrange, lo reconoció como parte de la pata de una de las criaturas más temibles que haya existido en Sudamérica: un pájaro del terror gigante. Este hallazgo, detallado en un artículo reciente en la revista Palaeontology, da nuevas pistas sobre estos enormes depredadores que dominaron Sudamérica hace 12 millones de años, en la época del Mioceno.
El hueso es un tibiotarso de la pata izquierda. El análisis indica que el ave en cuestión era hasta un 20 % más grande que cualquier otro miembro conocido de su especie, y probablemente alcanzaba más de 2,5 metros de altura, equipado con un pico ganchudo y una gran habilidad para cazar.
Un ecosistema antiguo y feroz
El fósil, marcado por posibles mordidas de un caimán gigante extinto, el Purussaurus, sugiere que el pájaro del terror no solo era un cazador eficaz, sino que también competía con reptiles de dimensiones colosales. "Sospechamos que el pájaro del terror habría muerto como resultado de sus heridas, dado el tamaño de los cocodrilos hace 12 millones de años”, explicó Siobhán Cooke, investigadora de la Universidad Johns Hopkins y coautora del estudio.
El desierto de Tatacoa, donde se encontró el fósil, era en el Mioceno una región repleta de ríos y vida silvestre de agua dulce. Además de aves del terror y caimanes, esta región fue hogar de gigantescos perezosos terrestres, primates y ungulados extintos que competían por territorio y presas.
Un predador emblemático
Con extremidades diseñadas para la velocidad y un cráneo en forma de hacha que, según un estudio de 2010 de la Biblioteca Pública de Ciencias, le permitía atacar con golpes precisos y devastadores, el pájaro del terror dominaba la cadena alimentaria en Sudamérica.
Para Cooke y su equipo, el fósil encontrado no solo representa un hallazgo excepcional, sino también una ventana única al pasado ecológico de la región. "Es un tipo de ecosistema diferente al que vemos hoy", explicó Cooke. "Habría sido un lugar fascinante para caminar y ver a todos estos animales ahora extintos".
Este descubrimiento también plantea la posibilidad de que existan más fósiles de estas aves del terror escondidos en colecciones de museos, esperando ser reconocidos. Durante su reinado, el pájaro vivió en Sudamérica cuando el continente estaba separado de América del Norte, y aún no tenía competidores provenientes del norte. Su pariente vivo más cercano, el seriema, de apenas 1 metro de altura, es solo una sombra de este titán prehistórico.
La mayoría de los fósiles de estos depredadores prehistóricos se han encontrado en el sur del continente, en países como Argentina y Uruguay, por lo que este descubrimiento en Colombia expande el mapa de su distribución. El equipo investigador confía en que el análisis del fósil y los estudios futuros revelarán más detalles sobre cómo estas aves se adaptaron a sus roles de depredadoras, aportando además conocimientos sobre la evolución de aves cazadoras modernas.
Referencia de la noticia:
Federico J. Degrange, Siobhan B. Cooke, Luis G. Ortiz-Pabon, Jonathan S. Pelegrin, Cesar A. Perdomo, Rodolfo Salas-Gismondi. “A gigantic new terror bird (Cariamiformes, Phorusrhacidae) from Middle Miocene tropical environments of La Venta in northern South America”. Palaeontology (2024). DOI: 10.1002/spp2.1601