Así cerró el 2019 en Argentina, ¿cómo continuará el verano?
Analizamos en base a la información oficial de Servicio Meteorológico Nacional qué sucedió durante el año pasado con las lluvias y las temperaturas. ¿Continuará la sequía en el centro del país?, ¿será un verano más caluroso? Te lo contamos.
Finalizó el 2019 con condiciones neutrales del fenómeno El Niño – Oscilación del Sur (ENSO, en inglés), principal modulador de las condiciones meteorológicas imperantes en la escala intraestacional sobre nuestro país. En este contexto, la variabilidad climática en gran parte del 2019 estuvo dominada fundamentalmente (aunque no exclusivamente) por lo acontecido en la escala sinóptica que involucra a los fenómenos que ocurren durante un transcurso de tiempo menor, típicamente en la escala de los 4 a 10 días.
El balance final del 2019, según se desprende de los datos oficiales registrados por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), indica que fue un año marcadamente seco en una de las áreas más productivas del país, con déficits de 200 a 300mm en una amplia zona que cubre el sudeste de Mendoza, San Luis, extremo sur de Córdoba, gran parte de La Pampa y toda la franja oeste bonaerense.
Un déficit destacado en lluvias también se registró durante 2019 en Tucuman, Salta y Jujuy, como así también en gran parte de la provincia de Misiones, mientras que en la Patagonia este faltante fue mucho menos significativo.
Por el contrario, lluvias más abundantes que lo normal se registraron durante el año pasado en gran parte del noreste argentino, con desvíos positivos de más de 400mm en ciudades representativas como Resistencia y Concordia.
En cuanto a temperaturas, el balance final 2019 es mucho más homogéneo territorialmente, indicando un año ligeramente más cálido que lo habitual en prácticamente todos los rincones del país, con anomalías positivas inferiores al grado centígrado.
Una conclusión que se desprende del análisis por separado de las anomalías de temperaturas mínimas y máximas medias, es que parte de la región Pampeana experimentó un 2019 con una mayor amplitud térmica, es decir, mínimas más bajas que lo habitual y máximas más altas que lo normal, mientras que sobre parte del norte argentino sucedió lo contrario, es decir, se redujo la amplitud térmica, con marcas mínimas más altas y registros máximos más bajos.
Perspectivas para el primer trimestre del 2020
El SMN dio a conocer las proyecciones climáticas en el país para los primeros tres meses del 2020. Este tipo de informe brinda una idea cualitativa y no cuantitativa de cómo podrían presentarse las precipitaciones y las temperaturas en las distintas regiones, y es realizado sobre la base del análisis de las previsiones numéricas experimentales de los principales modelos globales de simulación del clima y modelos estadísticos nacionales, sumado además al análisis de la evolución de las condiciones oceánicas y atmosféricas.
De este informe oficial se concluye que gran parte del país continuará con déficit de precipitaciones en este verano, destacándose con mayor probabilidad esta previsión para la región de Cuyo, Córdoba, La Pampa y el oeste de Buenos Aires.
Hacia el nor-noroeste y centro y norte de la Patagonia se espera también precipitaciones inferiores u ocasionalmente normales para el trimestre, mientras que condiciones normales prevalecerán sobre Entre Ríos, parte de Santa Fe y el centro y este de Buenos Aires. Solamente el sur patagónico presenta indicios de que será un trimestre más lluvioso que lo normal.
La previsión de temperaturas para estos primeros tres meses del año indica que no habrá sectores del país que presenten marcas más bajas en promedio que lo habitual. La Patagonia registraría un verano con marcas térmicas normales, mientras que la mitad norte argentina tendría temperaturas en promedio normales o más altas que lo normal, con mayor probabilidad sobre Cuyo, el Noroeste y el Litoral.