El invierno termina seco
En lo poco que queda del invierno no se prevén cambios significativos en el país. La esperanza recae en el comienzo de la primavera, en la última semana de septiembre, momento en el que podrían darse algunas lluvias especialmente en la franja norte.
Desde hace varios meses el evento La Niña viene amenazando en consolidarse y finalmente lo hizo en el comienzo de septiembre. Esto generó que la preocupación que se tenía debido al riesgo de afianzarse este evento comenzara a transformarse en una realidad.
Ya los meses de otoño e invierno fueron muy pobres respecto a los niveles de lluvia registrada, y a esto se le sumó la variabilidad térmica, que fue otro de los factores relevantes para esta etapa del año. Además, habría que agregar otro protagonista muy importante: el viento.
Perspectiva seca para los próximos 7 días
Analizando la anomalía de lluvias previstas para la semana, se observa que en general las precipitaciones estarán por debajo de los niveles medios en la mayor parte del país. Resalta un importante núcleo sobre la región del Litoral, donde probablemente las lluvias sean totalmente nulas a lo largo de los próximos 7 días.
Mientras tanto, las marcas térmicas seguirán siendo superiores a los promedios. Por lo tanto, el período del invierno finalizaría con características cálidas y secas en la mayor parte del país. El viento en general persistirá del sector norte, fomentando esta tendencia. Vale aclarar que durante el fin de semana se prevé un descenso térmico sobre el sur del área ampeana, que incluso podría dejar algunas heladas de moderada intensidad.
Primera semana de la primavera con mejor tendencia
Analizando la última semana del mes de septiembre se observa una tendencia un poco más favorable sobre la franja norte del país. En tanto, sobre la porción central y sur del país, las precipitaciones se aproximarán a los niveles normales para la época del año. Los núcleos de lluvia más importante se observarían sobre Corrientes y el sur de Brasil.
En cuanto a las marcas térmicas, la situación será inversa, ya que se espera que en promedio, las temperaturas se presenten por debajo de lo normal en la mayor parte del país. Esto podría potenciar el riesgo de heladas en la franja central y mantener las temperaturas máximas por debajo de los niveles medios.
¿Qué puede pasar en el mediano plazo?
La tendencia de lluvias a lo largo de los próximos meses muestra características muy cambiantes. Durante el mes de octubre y primera parte del mes de noviembre se podría observar un leve repunte de las lluvias en el sector central del país. Pero estas precipitaciones podrían observarse de manera dispersa y errática, con algunos núcleos importantes pero de manera irregular.
También hay que destacar que por el momento, el mes de noviembre ya mostraría a un evento La Niña bien consolidado, generando lluvias inferiores a los niveles medios en la mayor parte del país. Mientras, las marcas térmicas seguirían sufriendo una gran variabilidad, pudiendo potenciar eventos de helada tardía.